TENIS | ABIERTO DE EEUU

Clijsters vuelve a una final tras su retirada y Serena Williams dice adiós de mala manera

Se retiró el 6 de mayo del 2007para ser madre y hastiada por el castigo físico y regresó hace dos meses

NUEVA YORK Actualizado: Guardar
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La belga Kim Clijsters, en su retorno a la alta competición, se reencontró con el éxito, con una final de Grand Slam, la del Abierto de Estados Unidos, tras apabullar a la vigente campeona, la estadounidense Serena Williams, que terminó de mala manera su periplo por el último Grand Slam del curso.

La mala actitud de la tenista de Florida, plagada de experiencia, alumbrada por once títulos del Grand Slam, entre ellos tres logrados en Flushing Meadows, afeó un choque que recuperó a dos de las tenistas más lustrosas de los últimos tiempos. Dos jugadoras con pedigrí que en el pasado escribieron páginas intentas sobre la cancha.

Por detrás en el marcador, tras perder el primer set y con 6-5 en el segundo, el servicio de su parte pero 15-30 para su rival, a dos puntos del triunfo, la juez de línea le señaló una falta de pie en su segundo saque, que suponía la doble falta y dos puntos de partido para la raqueta europea.

En ese momento, Williams, con la raqueta señalando a la juez, la amenazó. "Te voy a matar", le dijo la tenista americana, según confesó la juez de línea a la juez árbitro, Louise Engzell. Engzell consultó con el juez principal, Brian Earley, que determinaron, a falta de, al menos un punto por jugar, la penalización, con un punto, a la vigente campeona. Esto supuso el pase a la final de Clijsters.

Williams, indignada, cruzó la pista para dar la mano a su rival y asumir su derrota. Earley reconoció después que se decidió la "penalización de Serena por conducta antideportiva".

Clijsters impone su ley

En la catalogada como una final anticipada, Kim Clijsters impuso su ley. Un juego para contrarrestar la fortaleza de Serena, demasiado pendiente de su saque y de la velocidad de sus golpes. Poco certeros.

Asimiló peor el parón propiciado por la lluvia. Que hizo esperar a las jugadoras en el vestuario durante más de ocho horas. Serena fue contracorriente en el marcador. Solventó cada ventaja rival, pero nunca se hizo con el mando del partido.

En el tramo final, Clisters se situó a orillas de la victoria en los dos últimos juegos al resto. La tensión de Serena fue evidente en el tramo final. Estaba contra las cuerdas. La falta de pie que se le señaló terminó por desorientarla.

Clijsters ha dejado en evidencia a tantas rivales como le han salido al paso. Se retiró el 6 de mayo del 2007 con 37 títulos en la mochila, entre ellos un Grand Slam. Deseosa de ser madre y hastiada por el castigo físico. Dos meses atrás volvió. y ha solventado cada contratiempo con solo dos torneos a sus espaldas. Cincinnati, donde llegó a cuartos y Toronto, en la tercera ronda.

Wozniacki alcanza su primera gran final

Clijsters disputará la final ante la danesa Caroline Wozniacki, que batió por 6-3 y 6-3 a la tenista Yanina Wickmayer. Wozniacki es la más joven de las veinte primeras raquetas que forman parte de la nobleza del circuito. Pero no carece de experiencia. Su historial se nutre de forma acelerada.

La única raqueta danesa, tanto masculina como femenina en estar entre los semifinalistas de un torneo grande en toda la historia, advierte con éxitos como Ponte Vredra Beach, Eastbourne y New Haven, además de alcanzar la final en Memphis, Charleston, Madrid y Bastad. La repercusión la alcanza en Flushing Meadows, que la proyectará en el ránking y alimentará su respeto en la competición.