La Policía entra en el avión secuestrado en México y detiene a los captores

Un avión procedente de Cancún, en el Caribe mexicano, ha aterrizado las 13:40 (hora local) en Ciudad de México con varios secuestradores en su interior que amenazaban con hacer detonar explosivos si no eran recibidos por el presidente del país, Felipe Calderón. La cadena de radio Formato 21 ha adelantado que el vuelo 576 de la compañía Aeroméxico llegó con varios secuestradores que exigieron al piloto dar varias vueltas alrededor de la ciudad antes de aterrizar.

Una vez en tierra, los pasajeros han comenzado a abandonar la nave tras permanecer 45 minutos retenidos. Todos se encontraban en perfecto estado y han sido recogidos por varios autobuses. Minutos después, la Policía accedía por la parte trasera del Boeing 737 y detenía a ocho personas, al parecer de origen boliviano, como presuntos autores del secuestro, aunque no se ha confirmado oficialmente el número de detenidos.

El presunto responsable del secuestro ha sido identificado como Josmar Flores Pereira, pastor evangelista de nacionalidad boliviana y con antecedentes penales, según informa el secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, quien ha explicado que Flores Pereira ha confesado que en pleno vuelo tuvo "una revelación divina que le condujo a esa acción". Según el ministro mexicano, el detenido ha dicho que hoy es día 9, del mes 9, del año 2009 y que si volteaba la hoja, esta fecha se podía leer como 6, 6, 6 (número del diablo según algunas supersticiones).

Tras la inspección de la aeronave, el secretario de Comunicaciones y Transportes de México, Juan Molinar Horcasitas, ha asegurado que nunca hubo explosivos en el avión y que en ningún momento los secuestradores han podido acceder a la cabina de los pilotos.

En el avión viajaban 104 personas y durante unos minutos las actividades de la terminal aérea fueron suspendidas, mientras que la aeronave era estacionada en la cabecera 23 de la terminal, un lugar apartado de las pistas y del tráfico aéreo. El aeropuerto de la capital mexicana ya ha vuelto a la normalidad y se ha abierto una investigación para esclarecer los hechos. El presidente Felipe Calderón tenía previsto llegar al aeropuerto por la tarde (hora local) para realizar una gira de trabajo por el estado de Campeche, pero ha sido aplazada por unas horas.