
El edificio de Ciencias estará listo el próximo año tras el desplante de Dragados
La paralización de las obras hace imposible que el primer curso del Plan Bolonia comience en las nuevas instalaciones como estaba previstoLa Escuela de Ingenieros sigue a la espera del contrato con la nueva empresa
CÁDIZ Actualizado: GuardarLa ampliación de la Facultad de Ciencias de Puerto Real vuelve a estar en marcha. Tras la liquidación del contrato con Dragados, la misma empresa que construye el segundo puente, la UCA se ha puesto las pilas y le ha colgado la etiqueta de prioritario a uno de los proyectos claves para la modernización del Campus del Río San Pedro. Tanto es así que la celeridad de los plazos ha sido uno de los requisitos fundamentales en la actualización del compromiso con la segunda adjudicataria del concurso público, la UTE San José-Cartuja.
La nueva constructora llegó a la obra a mediados de agosto, pero ha sido en esta última semana cuando comienza a aumentar ritmo. El compromiso de finalización se ha trasladado a septiembre de 2010, fecha límite que coincide con la entrada en vigor definitiva de todos los planes de estudios adaptados a Bolonia.
Con esa previsión jugaba la Universidad, que quería estrenar los nuevos cursos de la reforma universitaria de este año que comienzan en octubre de este año en el nuevo edificio, tal como avanzó el director general de Infraestructuras de la UCA, Diego Torres. En él se impartirán los grados de Matemáticas, Química y Ciencias Ambientales, además de los dobles títulos, también revisados ya. Los nuevos alumnos de esta facultad comienzan su primer año del Plan Bolonia, que sólo afecta al primer curso, en las antiguas dependencias.
Los trabajos de Ciencias venían aparejados a la construcción de la nueva Escuela de Ingenieros, que permitirá la reubicación de estas titulaciones en el campus puertorrealeño y liberar un edificio en pleno centro de Cádiz. La obra también estaba a cargo de Dragados que siguió la misma dinámica de ralentizar el trabajo a la espera de una revisión del presupuesto, que, en plena crisis, se volvió poco rentable. La adjudicataria será la UTE formada por Garasa y GEA 21, aún en trámites de unión temporal.
Septiembre será el mes estrella para ambos proyectos, insistió el responsable de Infraestructuras de la Universidad. No obstante, «hasta que no se formalice el contrato de Ingenieros no podrán entrar las grúas», aclaró.
Tanto la ampliación como la construcción de ambos edificios fueron adjudicados a Dragados en 2006 que asumió por escrito el compromiso de tenerlas a punto para el verano del año pasado. El presupuesto rondaba los 28 millones de euros, pero la mala situación en el sector de la construcción hizo que la obra resultara poco rentable, por lo que solicitaron un incremento de casi 19 millones más. La UCA se ha mantenido firme en todo momento y a riesgo de sufrir las consecuencias del retraso, decidió disolver el acuerdo.
Optimismo
Diego Torres prefiere ser optimista y confía en que ambas estarán listas para el próximo curso. «Los trabajos de Ciencias iban muy avanzados antes de los problemas con la empresa anterior. Eso nos ha permitido ganar tiempo, aunque llegará con bastante retraso a su inauguración». Ingenieros es otra cosa. «La obra no iba mal en su momento, pero es un edificio totalmente nuevo». La UCA está a la espera de que la nueva UTE se constituya y firmar cuanto antes. Sólo así se podrán volver a reanudar las tareas. Una vez rubricado el acuerdo se cuenta con un plazo de ejecución de entre 12 y 15 meses, lo que no da todas las garantías de que esté para el año que viene.
A pesar de las incidencias, los estudiantes de Ingeniería no contarán con un plan adaptado al Espacio Europeo hasta el curso 2010/2011. El Gobierno aún no ha publicado las competencias profesionales, por lo que no se pueden determinar qué asignaturas serán necesarias y cómo quedarán las titulaciones. Este retraso en la planificación motivó el año pasado movilizaciones ante la incertidumbre que genera. El no disponer de estas competencias supone también la imposibilidad para convalidar los títulos aún vigentes y saber cómo computarán las carreras de tres y las de cinco años.