De vela en vela
El 'Capitán Miranda' coincide en Cádiz con la despedida del patrullero 'Ordóñez' y el Juan Sebastián Elcano en reparación
CÁDIZActualizado:La provincia se ha convertido en un punto de encuentro de grandes navíos durante esta semana. Una reparación, una escala y una despedida han sido los motivos para un encuentro marinero que comenzó ayer con la llegada del velero Capitán Miranda.
Una vez más, el buque escuela de la Armada de Uruguay hace parada en Cádiz, donde tiene previsto quedarse hasta el próximo miércoles. Han pasado casi 80 años desde que el navío, construido por los Astilleros de Matagorda, surcó por primera vez las aguas de la provincia. Durante este tiempo ha ejercido de embajador del país en cada travesía. La última comenzó en marzo en el Puerto de Montevideo con escala en la capital para dirigirse posteriormente a Las Palmas de Gran Canarias.
La alcaldesa, Teófila Martínez, recibió al comandante Ricardo Della Santa y le dio la bienvenida a la ciudad donde se quedarán hasta el próximo miércoles.
Adiós y reparación
Durante su estancia en la localidad, el velero estará abierto para recibir las visitas del público. La vuelta de uno de los grandes veleros con sello de la factoría puertorrealeña coincide con la despedida a otro de los buques históricos de la Armada Española. Se trata del Ordóñez, que causó ayer baja en la lista oficial tras 32 años de servicio. La Marina organizó un acto en el muelle del Arsenal de La Carraca para decir adiós a tan insigne embarcación. El Ordóñez, cuarto buque de la clase Barceló, fue construido por Bazán en el taller de lanchas rápidas de su factoría de San Fernando. Fue botado conjuntamente con su hermano Acevedo y a lo largo de este tiempo de servicio de servicio, ha tenido como base el Arsenal de Cartagena, la Estación Naval de Porto Pi, nuevamente el Arsenal de Cartagena y, por último, el Arsenal de La Carraca que lo vio nacer.
El patrullero de la Armada tuvo como testigo de excepción en su despedida al buque escuela Juan Sebastián Elcano, que como cada año pasa por el muelle militar de La Isla para someterse a una revisión. La última parada en aguas gaditanas fue hace poco menos de mes y medio. Entonces, 193 personas comprendieron su dotación. Bajo su jarcia han cursado su cuarto curso 29 alumnos guardiamarinas -pertenecientes a la promoción número 410- y otros cinco de Infantería de Marina -pertenecientes a la promoción número 140 de este arma- a lo largo de este crucero de instrucción, que ha sido el octogésimo desde la construcción de esta embarcación en Cádiz.