Una congresista de la oposición muestra un cartel de protesta, rodeada de uribistas que se abrazan. / REUTERS
MUNDO

Uribe se aferra al poder en Colombia

El Congreso aprueba convocar un referéndum que le habilite para un tercer mandato

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El Congreso colombiano, tras arduos y largos debates, dio luz verde al referéndum que permitiría al presidente, Álvaro Uribe, presentarse a una segunda reelección. Hace dos semanas el Senado dio su visto bueno a la polémica ley. Con 85 votos a favor, sólo uno más de la mayoría absoluta necesaria, y cinco en contra los diputados gubernamentales celebraban la victoria, la oposición denunciaba la pérdida de la transparencia y los aspirantes a la presidencia comenzaron a reajustar posiciones por si el mandatario decide aspirar a repetir mandato el año próximo.

Ahora se abre un plazo de cuatro meses para que la Corte Constitucional colombiana determine que el trámite, iniciado en el año 2008 con el apoyo de más de cuatro millones de firmas, cumple los requisitos legales que permite a la ciudadanía pronunciarse sobre el cambio del artículo 127 de la Constitución para que un presidente pueda ser reelegido hasta tres veces consecutivas. Después el mandatario deberá sancionar la reforma. Por último, tendrá que ser votado por el 25% del padrón, unos ocho millones de personas. Previsiblemente, el tribunal recibirá un alud de recursos ante la supuesta inconstitucionalidad de la iniciativa.

Alegría oficial

Mientras tanto, entre estornudo y estornudo provocados por la gripe A, Álvaro Uribe continúa callando –el que calla otorga, dicen– sus intenciones de presentarse a las elecciones de mayo de 2010. El mandatario colombiano ha dicho hasta la saciedad que no desea perpetuarse en el poder, pero días atrás pidió a los legisladores uribistas acelerar el trámite en el Parlamento. Cumplido el encargo, en su entorno dan por seguro que, vencidos los impedimentos legales, volverá a intentarlo.

Tras doce horas de sesión y una vez estuvo la ley aprobada, los diputados afines a Uribe y miembros del Gobierno expresaron su alegría por el resultado entre gritos y abrazos. «Estoy muy contento», dijo el titular de Interior y Justicia, Fabio Valencia Cossio, al tiempo que aclaraba que «el referendo se ha tramitado conforme a la Constitución».

El ministro destacó que las denuncias sobre la inconstitucionalidad de la ley aprobada provienen de «personas sin capacidad ideológica para oponerse».

En cambio, los adversarios del presidente Uribe se quejaban amargamente del resultado y hablaban de «dictadura» y recordaban que en la anterior reforma constitucional de 2006 dos diputados, actualmente sancionados, vendieron su voto a cambio de prebendas, y denunciaron que esta vez ha pasado lo mismo, algo que el ministro Valencia negó: «Con esta aprobación se consolidó la democracia en Colombia, sin ninguna duda. La Cámara de Representantes ha interpretado el sentimiento mayoritario de los colombianos».

También entre los precandidatos presidenciales la idea de volver a competir con Uribe provoca urticaria. Para Gustavo Petro, del Polo Democrático, se compraron congresistas y eso ha permitido cambiar la Carta Magna para crear «una dictadura en Colombia».

El senador Petro comparó al actual dirigente del país con su colega venezolano Hugo Chávez. «Desde el punto de vista formal no se diferencian en nada», expresó. Y agregó: «Uribe terminará manejando la Corte Suprema de Justicia y la Corte Constitucional. Es la muestra más clara de que Colombia va camino de una dictadura total».

Pretendientes

El aspirante independiente Lucho Garzón, afirmó que «a partir de ayer la política es otra», porque deben pensar en un Uribe candidato que cierra el paso a otros posibles postulantes del uribismo. En esa situación estaría el ex ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, quien expresó sus ambiciones presidenciales pero aseguró que si su ex jefe se presentaba lo apoyaría. Otro de los pretendientes, Sergio Fajardo, aseguró que «en la aprobación del referendo la palabra transparencia no aparece», pero seguirá.

De las pocas que pensaban que el referéndum aún pudiera no salir era la ex magistrada de la Corte Constitucional, Clara Inés Vargas. A su juicio, los nueve magistrados del alto tribunal, tres uribistas, tres opositores y tres indecisos, deberán «preocuparse de la forma y del fondo de esta ley» y verificar si «con esta reforma vamos a quedar con una Constitución distinta. No veo imposible, pero sí difícil que la consulta pase», puntualizó.