El líder popular se jacta de la honradez de sus dirigentes
MADRID Actualizado: GuardarCon un mes de retraso, la dirección del PP celebró el archivo de la causa judicial contra Francisco Camps y otros populares valencianos por el regalo de trajes del entramado corrupto del 'caso Gürtel´. Lo hizo Mariano Rajoy en el Comité Ejecutivo Nacional y en presencia del presidente valenciano, ante el que calificó de «justa» la decisión del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana que ha sido recurrida por la Fiscalía.
El líder del PP aprovechó para jactarse de la honradez de sus dirigentes durante su mandato al frente del partido. «Desde el año 2004, no hay ningún militante del PP -que yo sepa, puede que se me haya escapado algún caso- que haya sido condenado y hay varios del PSOE condenados, aunque algunos luego fueron indultados por el Gobierno», comentó al anunciar la inminente presentación del documento elaborado por Soraya Sáenz de Santamaría sobre «el trato diferente de la Fiscalía» a los militantes del PP y el PSOE.
Dentro de pocas fechas, según dijo, se conocerá el contenido del dossier que, además, incluirá datos de las «detenciones televisadas impropias de un régimen democrático normal» por casos de corrupción y «filtraciones continuas» de los procesos judiciales. «Yo no tengo interés ninguno (sic) en que esto se convierta en un eje del debate político, pero sí tengo interés en que España sea un país y una nación de ciudadanos libres e iguales en todo», explicó para justificar la campaña emprendida por su partido para denunciar la supuesta persecución.
El citado informe no incluye las escuchas ilegales a las que tampoco aludió Rajoy ni otros dirigentes del PP que intervinieron en la reunión se celebrada ayer. Ni siquiera la secretaria general mencionó en su informe al comité los pinchazos telefónicos que ella misma denunció en agosto. Pero Dolores de Cospedal volvió sobre el mismo asunto en una entrevista en Telecinco. Insistió en que dispone de «indicios» que prueban el espionaje a dirigentes de su partido que no están relacionados con sumarios judiciales.
Sin acusar directamente al ministro del Interior, comentó con ironía las quejas del PSOE por las denuncias del PP que responsabilizan de las escuchas a Alfredo Pérez Rubalcaba. «No sé de qué se sorprenden los socialistas. No sería la primera vez que ocurre en España», señaló en referencia a las escuchas ilegales de los servicios de inteligencia que se descubrieron en el año 1995. «Qué casualidad -añadió-, en aquel entonces, también fue con el gobierno socialista».