Colombia denunciará a Chávez en la OEA por su «descarado intervencionismo»
Unas declaraciones del presidente venezolano que advierten que Bogotá se convertiría en un "centro operacional" al servicio estadounidense generan la solicitud de una moción de rechazo ante el organismo
CARACAS/BOGOTÁActualizado:Colombia presentará una moción de rechazo ante la Organización de Estados Americanos (OEA) por lo que entiende como un "descarado intervencionismo" en los asuntos internos de Colombia del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, según ha informado el embajador de Bogotá ante este organismo, Luis Alfonso Hoyo.
Ante las reiteradas críticas y acusaciones del mandatario venezolano sobre el acuerdo que permitirá al Ejército de Estados Unidos utilizar siete bases militares en suelo colombiano, Hoyos ha asegurado en una entrevista a la emisora Caracol Radio que entregará a las 34 delegaciones de la OEA una moción informando que repelerá todas las acciones "expansionistas" de Chávez.
El embajador colombiano ante la OEA ha advertido además de que las declaraciones efectuadas este domingo por Chávez, quien dijo que Colombia se va a convertir en "un centro operacional" del Ejército y los servicios de inteligencia estadounidenses, habían rebosado todos los límites del derecho, la cortesía, el respeto y la sensatez.
Hoyos ha especificadp que espera que la nota de protesta de Colombia anunciando que "repelerá por todos los medios el intervencionismo chavista" sirva de marco de discusión en el Consejo Permanente del organismo, que generalmente se reúne los miércoles.
Unasur discutirá sobre las bases
Mientras, Colombia intenta una sanción por parte de la OEA a Venezuela, los presidentes que integran la Unasur se reunirán el próximo viernes en una cumbre extraordinaria en la ciudad argentina de Bariloche para debatir el polémico acuerdo militar entre Bogotá y Washington.
En la fría Bariloche, situada unos 1.650 kilómetros al sur de Buenos Aires, los mandatarios de los doce países de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) buscarán evitar que el acuerdo negociado entre Colombia y Estados Unidos caldee aún más las relaciones de los gobiernos de la región.
Venezuela, Ecuador y Bolivia figuran como los principales opositores al acuerdo que permite que militares estadounidenses utilicen hasta siete bases colombianas, lo que es calificado como una "amenaza" por Caracas, y como "un asunto gravísimo" por Quito, vecinos de Bogotá y principales afectados por la medida.
Mientras, Argentina y Brasil han manifestado su malestar por el convenio y exigen "garantías" para que el trato se ajuste a los propósitos declarados y no haya injerencia en terceros países. Por su parte Perú, Chile y Paraguay han garantizado a Uribe el "respeto" a su decisión de compartir las bases y Uruguay se ha mostrado respetuosa de la soberanía nacional, aunque recordó su postura contraria a la presencia militar extranjera en Suramérica.