«El año pasado nos agredieron por nuestra bandera»
| CÁDIZActualizado:Una enseña multicolor ondea sobre el puesto de discapacitados de la playa Victoria. No es la primera vez que otea la fiesta desde su posición privilegiada, ni que sirve para agrupar a una docena de jóvenes en torno a una idea: la reivindicación sexual. Salva, Joaquín, Mala o Gusi forman parte de un pandilla de homosexuales que aprovechan la barbacoa para mostrarse su amor y gritar a todos los concurrentes que el orgullo gay es mucho más que el ya tradicional carrusel que organiza el colectivo en junio. En la edición del 2008, a pesar de sus buenas intenciones y mejor comportamiento, el grupo fue víctima de una agresión por parte de otros jóvenes que no entienden que en la playa hay sitio para todos. Vienen de Chiclana, Tenerife o Murcia y aunque tuvieron una mala experiencia, reconocían que este año la reunión marchaba sin problemas. Para eso habían hecho acopio de los ingredientes básicos de una barbacoa y «mucha cerveza». Y es que es una reunión como otra cualquiera, aunque no llevan banderas de fútbol. El reclamo, por el momento, les funcionaba bien. «Este año pasa mucha gente para felicitarnos y saludarnos», comentaba la orgullosa Mala.