«Son noches más pacíficas de lo que la gente piensa»

Antonio Rivas es inspector jefe de la División de Seguridad y esta noche está encargado de la coordinación entre las diferentes fuerzas de seguridad: Policía Nacional, Guardia Civil, Protección Civil y sanitarios. Además, se encarga de coordinar a los agentes de la empresa de seguridad que se encuentran en cada acceso a la playa, encargados de que no entre en la playa ni carros de los supermercados ni mobiliario de casa.

Antonio tiene 47 años y lleva 12 trabajando la noche de las barbacoas. Él designa un servicio de Policía Local en el que trabajan un subinspector, dos oficiales y 24 agentes de refuerzo, además del turno habitual. Controlan las barbacoas dentro y fuera de la arena.

Normalmente es una noche pacífica, teniendo en cuenta la cantidad de personas que se congregan en la playa y el factor alcohol. Hay más peleas de lo habitual pero gracias a la coordinación de los operarios y al extenso número de policías se solventan allí mismo, sin necesidad de trasladarlos.

Además también controla que los botiquines y servicios de playas, que permanecen toda la noche abiertos cumplan con su cometido.

Cuando finaliza la noche, a las 6 de la madrugada, comienza una de las tareas más difíciles, el desalojo de la playa. Para ello, la Policía Local está coordinada con la Guardia Civil y así facilitan a los servicios de limpieza que comiencen con su labor.

Antonio trabajará una jornada entera para evitar que no haya ningún incidente durante toda la noche y que la playa quede despejada a su hora.