«Es la fiesta del verano»

El Ayuntamiento de Cádiz siempre ha estado a favor de este evento. No hace falta recordar, de nuevo, su obsesión por entrar en el libro de los récord. Sin embargo, cuando los usuarios comenzaron a introducir en la playa objetos y mobiliario tomó cartas en el asunto para racionalizarlo. Desde hace varios años se comenzaron a tomar medidas expresas para ese día, como no poder llevar muebles. Cada verano se realiza además una campaña de concienciación en la ciudadanía para que todo lo que entre por la noche en la playa salga a la mañana. Eso es todo un punto a favor que destacan los que apoyan esta fiesta.

Igualmente, agosto tras agosto se mejora en los trabajos de limpieza, se compran máquinas más sofisticadas que recogen las piedras y restos de colillas y la alcaldesa, Teófila Martínez, deja claro en un bando las instrucciones que deben respetarse para poder disfrutar del evento.

Pero sobre todo, el motivo más relevante para que los ciudadanos apoyen las barbacoas es que que sólo se celebra un día al año y ya es una tradición, además de ser la única gran fiesta que hay en verano, «tiempo en el que la ciudadanía está de mejor humor, los niños de vacaciones y todos pueden disfrutar de una noche en la playa».

Recuerdan que los que van a las barbacoas «deberían ser más conscientes de la importancia de recogerlo todo pero no por eso se debe dejar de celebrar este festejo», argumentan.