Los sindicatos defienden el trato dado a los detenidos en Palma

Un informe interno del mayoritario Sindicato Unificado de Policía (SUP) defendió ayer el trato dado a los arrestados en la Operación Espada y criticó a la clase política por la instrumentalización que se ha hecho del caso.

El sindicato rechazó cualquier sanción a los agentes implicados y recordó que se han aplicado los mismos criterios de siempre. Además, amparó de manera expresa la labor del comisario jefe de Seguridad Ciudadana de Mallorca, que el miércoles asumió la responsabilidad de no haber cumplido las órdenes dadas por sus superiores, en concreto del jefe superior de Policía de Baleares, Bartomeu Campaner.

El SUP subrayó que si algo se vulneró entonces fue la «exposición innecesaria» de los detenidos, por los que exige una investigación para conocer qué persona del juzgado permitió el acceso de los medios al interior del edificio judicial.

Por su parte, la Confederación Española de Policía (CEP) también negó que el responsable de Seguridad Ciudadana ni ningún miembro de la Jefatura Superior de Baleares sea responsable de estos hechos, «ya que su trabajo se ha ajustado a la legalidad».

El sindicato recuerda que la posibilidad de atemperar o graduar los rigores de una conducción de detenidos a sede judicial es potestad de la Policía, por lo que no entiende por qué el delegado del Gobierno intervino en la toma de decisiones.