No hay sanciones a la vista

La temporada de verano cumple su ecuador y la Demarcación de Costas no ha incoado de, momento, ningún expediente por irregularidades en los chiringuitos. Por ahora cumplen a rajatabla la normativa que les obliga a ocupar 150 metros cuadrados en la playa y a mantener una distancia de separación de 200 metros el uno del otro. Los kioskos, por su parte, deben guardar una separación de cien metros. La últimas sanciones por ocupar más superficie de lo permitido se pusieron en la temporada de 2007.