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Los dueños de los chiringuitos quieren abrir también los fines de semana de invierno

En septiembre plantarán cara a las administraciones sobre horarios y ampliación de temporada para poder sortear la crisis Los empresarios desean que la decisión sea su responsabilidad

| CÁDIZ Actualizado: Guardar
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Los empresarios de los chiringuitos de la provincia vuelven a la carga. Cuando la temporada de verano ya atraviesa su ecuador, los empresarios piensan en el invierno. Están dispuestos a seguir abiertos a partir de noviembre, los fines de semana. Para ello, el próximo septiembre presentarán una iniciativa conjunta ante la Demarcación de Costas para ampliar la temporada y establecer horarios.

El secretario de la Asociación Gaditana de Empresarios de Playa (Agepla), Antonio Galván, adelantó ayer a este periódico que el próximo septiembre se celebrará una reunión en Málaga a tres bandas donde los empresarios del sector elevarán esta iniciativa al Ministerio de Medio Ambiente, que tiene las competencias, y a la Junta, que ha anunciado su interés por asumir esta responsabilidad.

Galván destacó al respecto que el plan de playas aprobado en la provincia recoge que la temporada de los chiringuitos en Cádiz transcurre de abril a octubre. Posteriormente, los establecimientos tienen que ser desmontados y retirados del litoral.

Los empresarios están en contra de esta medida y son partidarios de romper la estacionalidad con la apertura de los negocios también en invierno. Esta solicitud tuvo su eco en 2007 cuando un acuerdo verbal con el anterior jefe de la Demarcación de Costas permitió a una docena de chiringuitos continuar con su actividad después de octubre. Sin embargo, el negocio no fue todo lo bien que se esperaba y terminaron desmontando poco después de diciembre.

La implantación del plan de playas en 2008 ha cambiado las tornas. La Demarcación de Costas no acepta ahora este tipo de solicitudes. El pasado año siete empresarios cursaron por escrito su intención de abrir y fue denegado. Sólo uno en Sanlúcar se embarcó y ha sido expedientado. Los locales que pretendían ampliar la temporada estaban localizados en las playas de Chipiona, Chiclana y Sanlúcar.

Los empresarios consultados por este periódico reconocen que la situación económica es complicada y la inversión para sacar adelante el negocio es fuerte. No hay que ovidar que un chiringuito paga un canon anual al ayuntamiento de turno de 4.000 a 6.000 euros, depende de la ubicación. Además, el montaje y desmontaje del local supera los 6.000 euros. Los gastos obligan a los propietarios de esta concesión administrativa a que sean negocios puramente familiares. El sector de los chiringuitos, hay 120 este año en el litoral gaditano, da empleo a 1.500 personas durante la temporada de verano.

Desde la asociacion se ha puesto de manifiesto la necesidad de abrir en invierno y quieren que esta medida sea una decisión del propio empresario y no una imposición de la Administración, que sea el dueño del local el que asuma el riesgo de la apertura. Para minimizar esos riesgos y a la vez conseguir rentabilidad, los empresarios apuestan por mantener abierto el negocio los fines de semana.

Las expectativas económicas pueden mejorar en los próximos meses y remontar la crisis. Los empresarios del sector quieren aprovechar la situación. Están convencidos de que hay zonas en la costa gaditana, como Chiclama, Sanlúcar, Conil y Chipiona, en los que la apertura en invierno sería rentable y ayudaría a mejorar el sector turístico.

Este plan marco es el que luego adopta cada municipio para regular la presencia de estos establecimientos. En cualquier caso, los negocios que permanezcan abiertos fuera de los límites de temporada establecidos por la ley, se enfrentarían a multas de entre 25.000 y 30.000 euros. De ser sancionados, se tratarían de las multas más altas impuestas en la provincia, ya que hasta ahora el importe no había superado los 600 euros y siempre por exceder la extensión permitida o por un tratamiento inadecuado de la basura. Así las cosas, sin autorización previa, el negocio a buen seguro que no es tan rentable.