Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
EL AVATAR

Lucha contra el tiempo

ANA MENDOZA amendoza@lavozdigital.es
Actualizado:

Recuerdo bien aquel viaje. Ir a Cádiz desde El Puerto a bordo del Vaporcito era una gran experiencia para una debutante. Lo examinaba todo con detalle y captaba cada movimiento, cada instante, con una atenta mirada. Entonces no parecía tener prisa. Esta pasajera disfrutaba del trayecto mientras que la máquina funcionaba para llegar a su destino.

Convirtió al Adriano en su medio de transporte habitual. Porque le gustaba y le resultaba una práctica forma para poder desplazarse sin sufrir el estrés del asfalto. Pero la vida se hacía cada vez más frenética. Incluso para ella que siempre había ido contracorriente. Tardar menos, llegar antes, ganar tiempo... Esas premisas se habían extendido y sus compañeros de viaje se habían fijado en otros medios más modernos, más rápidos... La batalla la había ganado la prisa. Estamos convencidos de que no hay tiempo que perder. Pero después lo malgastamos en demasiadas disputas y discrepancias sin sentido. Como hicieron otros, la pasajera renunció finalmente a ese pequeño placer diario, a los mecidos de unas travesías que le aportaban tanta paz.

El Adriano III sobrevive ahora como puede. Aguanta el temporal con miedo. Su futuro aún es incierto. Ni las subvenciones públicas ni los programas especiales ni los paseos nocturnos contrarrestan los apuros de este emblema. Y es que al Vaporcito no le basta sólo con eso. Ni con las visitas turísticas del verano. No se puede luchar contra la celeridad y la urgencia con la que vivimos. La impaciencia y la premura no dan respiro a este barquito. Y mucho tendríamos que cambiar para dejar de luchar contra el tiempo.