Gol, trofeo, y punto y seguido

El Xerez volvía a salir de la cueva de Montecastillo con la intención de calentar el inicio de Liga y volver a reencontrarse con el balón. La cita, todo un clásico de los últimos años: el XXX Trofeo Villa de Puerto Real. El resultado, tal vez lo que menos teniendo en cuenta la fecha, aunque destacando que Leandro Gioda demostró que tiene ganas de explotar en Europa. Un tanto del zaguero argentino le dio el trofeo a un Xerez Deportivo que demuestra que quiere jugar rápido.

Cuco volvía a apostar por el clásico 4-4-2 de la segunda parte de Arcos, aunque en esta ocasión sacaba de inicio a Leandro Gioda y hacía debutar a Renan. Ziganda muestra su filosofía pronto, ya que en el segundo amistoso de la pretemporada el navarro expuso todo su arsenal creativo: contundencia atrás, rapidez a la hora de tocar el balón y trabajo, mucho trabajo.

Los minutos iniciales fueron similares a los de Arcos, con un Xerez dominador ante una escuadra entusiasmada por enfrentarse a todo un Primera. Muy motivado, por cierto, el ex del Industrial al enfrentarse al que fuera hace tres temporadas su equipo. Y fue precisamente David el que dio primero el susto a la parroquia visitante en el minuto 10 de partido. Y es que el Puerto Real se veía muy entero y aprovechaba las imprecisiones de un Xerez que no convencía a su entrenador y que caía en el juego brusco, fruto de la impotencia al encontrarse un rival muy serio. Eso sí, se pudieron ver algunos detalles positivos como la seguridad por alto de Renan, o el buen hacer de un Leandro Gioda que no pierde nunca la posición. Además, Cuco apuesta claramente por el juego al primer toque, toda una quimera para un equipo que lleva dos semanas y media de entrenamientos sólo, y que ayer afrontaba su segunda parada de pretemporada.

Con el descanso llegó el cambio de sistema. Ziganda apostó de nuevo con el 4-1-4-1, con Redondo de medio centro destructivo, Viqueira mandando y Armenteros debutando. Un estilo que le está yendo mejor a este equipo en lo que llevamos de pretemporada. Pero todo era cuestión de tiempo, de abrir la lata y con Abel y Viqueira en el campo la cosa pintaba bien. Tanto, que fue el sevillano quien botó una falta que acabó en las mallas gracias a un gran testarazo de Leandro Gioda. Buenas mimbres parece tener el argentino que tapó el debú de su compatriota, Armenteros, quien se destapó como extremo, pero también como lateral.

Pero el Puerto Real no se achantó y se lanzó en busca del empate de manera desesperada. Con un juego muy rápido por bandas, los locales apretaban de lo lindo ante un equipo que bebía de las creaciones de Abel y Viqueira. Las conexiones entre los media puntas azulinos y Armenteros parecen que prometen, por lo visto ayer, en un duelo que tocaba a su fin con mucho suspense y con el Xerez Deportivo de Ziganda levantando la copa.