El brote de peste neumónica se cobra una nueva vida en China
Las autoridades ya han puesto en cuarentena a más de 10.000 personas e impiden la salida de población de varias grandes ciudades
| MADRIDActualizado:Mientras las autoridades sanitarias chinas se afanan por exterminar a los roedores e insectos que pueden alojar la bacteria que causa la temida peste neumónica, esta letal enfermedad se cobraba ayer una tercera víctima mortal en Ziketan, una ciudad de 10.000 habitantes sellada por el Gobierno desde que se detectara el brote de esta epidemia el pasado fin de semana. Según informaba la agencia estatal de noticias Xinhua, un hombre de 64 años llamado Danzhi, vecino de los dos anteriores fallecidos, moría tras haber sido puesto en cuarentena en el hospital de Ziketan, una remota localidad del Tíbet histórico enclavada al oeste del país en la provincia de Qinghai y a unos 3.000 kilómetros de Pekín.
Tras su muerte, quedan otras nueve personas, la mayoría familiares de la primera víctima, ingresadas en el centro hospital e infectadas por la peste neumónica. De estos pacientes, uno se encuentra en estado grave y otro presenta síntomas de un resfriado con dolor en el pecho, pero los demás se hallan estables y las autoridades no han informado de nuevos contagios en Ziketan. Para impedir la propagación de este brote epidémico, causado por la misma bacteria que provoca la peste bubónica pero mucho más letal si no se recibe tratamiento en las primeras horas, la policía ha cerrado Ziketan a cal y canto y montado controles en un radio de 28 kilómetros. Nadie puede salir ni entrar en la ciudad, donde sus vecinos son obligados a llevar mascarillas y la mayoría de las tiendas se encuentran cerradas.
«Mucha gente de fuera huyó la última noche tras enterarse de que había muerto otra persona por la peste», explicó por teléfono a la agencia AP un vendedor de comida en un mercado callejero apellidado Han, quien aseguró que «han vuelto a sus casas con comida, agua mineral y sus burros».