Las Cortes reciben los suplicatorios de Bárcenas y Merino enviadas por el Supremo

El Congreso y el Senado han recibido esta mañana los suplicatorios que ha solicitado el Tribunal Supremo para poder investigar al diputado del PP por Segovia Jesús Merino y al ex tesorero del partido y senador por Cantabria Luis Bárcenas por los presuntos delitos de fraude fiscal y cohecho, en el marco del 'caso Gürtel'. Aunque las peticiones de autorización se han registrado hoy, su tramitación no arrancará hasta septiembre, cuando se inaugure el nuevo periodo de sesiones.

Este trámite, necesario para continuar con la causa en torno a los dos parlamentarios 'populares', se produce una semana después de que la Sala de lo Penal hiciese pública su decisión de investigar a Bárcenas y Merino por los citados delitos. La remisión a las Cortes de esta decisión se encontraba a la espera de la firma del presidente del tribunal, Carlos Dívar, quien se encuentra fuera de Madrid, según las fuentes consultadas. Finalmente ha sido el presidente de la Sala de Vacaciones -instancia del Supremo habilitada para el mes de agosto-, el magistrado Juan Antonio Xiol, que, en este momento, ejerce en funciones la presidencia del alto tribunal, quien ha firmado la petición.

Los Reglamentos del Congreso y el Senado establecen que el suplicatorio se entenderá denegado si el Pleno no se ha pronunciado sobre el mismo en "el plazo de sesenta días naturales, computados durante el periodo de sesiones a partir del día siguiente al del recibo del suplicatorio". Dado que julio y agosto son inhábiles, este plazo comenzará a contar el 1 de septiembre.

Primera tarea tras las vacaciones

El proceso de tramitación de los suplicatorios se iniciará la primera semana de septiembre. En el Congreso arrancará cuando sea calificado por la Mesa del Congreso en la primera reunión que el órgano de gobierno de la Cámara celebrará tras el paréntesis estival. A continuación el escrito será remitido a la Comisión del Estatuto del Diputado, que preside el socialista Francecs Vallés. Este órgano, que da audiencia al afectado para que se explique personalmente o por escrito, tiene 30 días para concluir su trabajo, aunque es previsible que lo haga en una o dos semanas.

Después el suplicatorio será sometido a votación secreta en el primer Pleno ordinario que se convoque y el presidente del Congreso, deberá informar al Tribunal Supremo de la decisión adoptada en los siguientes ocho días.

El proceso es muy similar en el Senado. Allí la petición será analizada por la Comisión de Suplicatorios, de la que precisamente Bárcenas es uno de los vocales del PP. Fuentes 'populares' explican que prevén nombrar a otro senador para sustituirle en este órgano. Una vez que la Comisión de Suplicatorios dé audiencia a Bárcenas y concluya su tarea, el suplicatorio se elevará al Pleno para su votación que, como en el Congreso, tendrá carácter secreto. En ese caso, Rojo también contará con ocho días para comunicar al Supremo la decisión que adopte la Cámara Alta.

Desde que se acordó solicitar el suplicatorio, el pasado 29 de julio, la tramitación del procedimiento contra Merino y contra el senador del PP por Cantabria Luis Bárcenas quedó suspendida hasta que las Cámaras resuelvan si les levantan o no la inmunidad parlamentaria. En el caso de que el Senado o el Congreso negasen la autorización, la causa se sobreseerá en lo que afecte al parlamentario implicado, pero continuará contra los demás procesados.