Xabi Alonso, la guinda del nuevo Madrid

«Espero que esto se solucione lo antes posible», aseguraba un resignado Xabi Alonso el pasado domingo. Su deseo se ha cumplido 48 horas después. El Real Madrid puso fin a uno de los culebrones del verano y se hizo este martes con el jugador del Liverpool por unos 30 millones de euros tras unas duras negociaciones que se han prolongado durante varias semanas y donde no han faltado maquiavélicas estrategias, amenazas de ruptura, filtraciones y presiones del propio jugador. A falta del reconocimiento médico, el internacional español, de 27 años, firmará por cuatro temporadas a razón de 4,5 millones de euros por cada una de ellas.

La contratación del donostiarra parecía cuestión de tiempo. Desde la época en que militaba en la Real Sociedad, el Real Madrid siempre mostró interés en el mediocentro. Pero en 2004 Alonso dio el salto a la Premier, donde se adaptó sin dificultades y se erigió en uno de los pilares básicos del Liverpool. Se ganó el cariño de Anfield por su profesionalidad dentro y fuera del campo.

Sin embargo, la mala relación con el técnico de los reds, Rafa Benítez, a raíz de una serie de enfrentamientos la pasada temporada ha precipitado su salida. El resultado es satisfactorio para las tres partes. El Madrid le da a Pellegrini el organizador reclamado una y otra vez, que debe surtir de balones a las estrellas ofensivas. Xabi Alonso cumple su deseo de recalar en el Santiago Bernabéu y empezar una nueva etapa lejos de Benítez. Además, el Liverpool ve aliviada su acuciante necesidad económica, ya que debía hacer frente a un pago de 39 millones en las próximas semanas. El club inglés tiene una deuda acumulada de 336 millones de euros.

Ardua negociación

Sin embargo, el camino recorrido hasta lograr el acuerdo no ha sido nada fácil. Florentino siempre ha distinguido entre jugadores de inversión y jugadores de gran calidad. Según el presidente, Cristiano Ronaldo o Kaká pertenecerían a los primeros. Son futbolistas que a su extraordinario talento se suma su capacidad para generar dinero a través de contratos publicitarios y derechos de imagen. Eso garantiza amortizar los estratosféricos costes de sus fichajes. Siguiendo con esta teoría, hay jugadores de mucha calidad que no tienen una proyección internacional. Ese sería el caso de Xabi Alonso y ese sería el motivo por el que el presidente no estaba dispuesto a pagar los 40 millones de euros exigidos por el Liverpool. El máximo mandatario blanco se plantaba en 27 millones de euros.

El pasado domingo, aprovechando el amistoso entre los ingleses y el Espanyol, en el que Alonso sólo jugó seis minutos, se celebró en Barcelona una reunión entre el director general de los reds, Christian Purslow, y su homólogo blanco José Ángel Sánchez. La cumbre acercó posturas y las diferencias económicas se redujeron considerablemente. Pese a las reticencias de Rafa Benítez, que aseguraba contar con el donostiarra para el presente curso, el fichaje del centrocampista de la Roma Aquilani dejaba vía libre a la salida del español. Alonso, que se encuentra en Noruega donde debía disputar un partido de pretemporada con el Liverpool, viajará en las próximas horas hacia la capital de España.

Con la llegada de Xabi Alonso el Madrid prácticamente cierra la plantilla para este curso en lo que a altas se refiere.

El adiós de un veterano

Por otra parte, el lateral Michel Salgado dejará de pertenecer a la disciplina del Real Madrid. La entidad madridista y el jugador gallego han llegado a un acuerdo para rescindir el contrato que unía a ambas partes hasta el 30 de junio de 2011. De esta manera, el club de Concha Espina va aligerando su nómina de jugadores para el próximo curso.

Por ello, durante la sesión vespertina realizada en la jornada de ayer, Salgado se ejercitó en el gimnasio, alejado del resto del grupo. Tras diez temporadas en el Real Madrid, el jugador negociando la rescisión del contrato que mantiene con el club por una campaña más. Unas negociaciones que, según señalan algunas fuentes, están muy cerca de cerrarse.