El objetivo es reducir los abortos

En 2004 se superaron en Cádiz las 2.000 interrupciones voluntarias del embarazo, una cifra que ha descendido en los últimos años situándose en torno a las 1.700. Con la nueva medida se espera que el número siga reduciéndose al facilitar un medicamento de urgencia que hasta el momento sólo se dispensaba en centros médicos o farmacias con receta. De hecho, la Consejería de Salud fue, en mayo de 2001, la primera administración autonómica que decidió dispensar este fármaco anticonceptivo en los servicios de urgencias de centros de salud y hospitales.

Según un estudio realizado en Cádiz sobre el perfil demográfico de las solicitantes predominan las mujeres solteras sin hijos que presentan una escasa formación y un mal uso o ausencia de métodos anticonceptivos. Se agrupan en barrios con nivel socioeconómico medio-bajo en donde las políticas de planificación familiar necesitan reevaluarse.