Suspenden un juicio al darse por muerto a uno de los acusados

No se presentó ayer a la Audiencia, donde estaba convocado por el tribunal como acusado en un juicio por tráfico de inmigrantes. Y cuando los agentes de Policía se personaron en su vivienda, a buscarle, les anunciaron que el procesado había muerto.

El suceso motivó ayer que el tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia suspendiera temporalmente la vista oral en la que el fallecido debía comparecer. Aunque el tribunal no tenía ayer aún constancia de dónde ni en qué circunstancias se produjo el fallecimiento del acusado, según fuentes consultadas por este periódico. Por lo que deberán investigar los hechos.

En todo caso, el juicio deberá celebrarse aún contra el segundo implicado en el delito, al que el fiscal pide siete años de prisión por trasladar desde Marruecos a inmigrantes ilegales.

Se llamaba Lucifer el velero de 12 metros con el que los dos acusados cruzaban el Estrecho. Aunque a diferencia de las mafias dedicadas al tráfico de personas, sólo embarcaban de tres o cuatro personas por cada viaje, a los que cobraban 1.500 euros a cada uno, según el relato de Fiscalía.

En agosto de 2007, en su último viaje, el mar les jugó una mala pasada y naufragaron en mitad del Estrecho con tres inmigrantes a bordo. El barco se hundió, y ellos y los marroquíes fueron rescatados por una lancha de Salvamento Marítimo, que los trasladó hasta Puerto América, en Cádiz.