Las obras en Ikea se paralizan a causa de la presión sindical

El líder de CC OO en Jerez, José Manuel Trillo, ya lo había advertido: «No vamos a permitir que Ikea campe a sus anchas en Jerez y no obligue a las subcontratas que están realizando los trabajos de su tienda a que cumplan con la legalidad». Y ayer se confirmó que tanto el sindicato como el centenar de desempleados que lleva días protestando a las puertas de la obra por los incumplimiento del convenio y el veto a la contratación de obreros de la zona hablaban en serio.

En torno a las 9.00 horas de ayer, los responsables de CC OO se personaron a las puertas de la obra y después de hablar con el encargado de seguridad le advirtieron de «la conveniencia de que los trabajos no continuaran hasta que no tengamos la reunión con Ikea que estaba prevista para hoy (por ayer) y que la empresa desconvocó sin ninguna explicación, porque los ánimos están muy caldeados entre los alrededor de 100 parados que llevan días de protesta, y es mejor que evitemos disputas o conflictos», apuntó ayer Trillo.

Así, los trabajos de construcción de la tienda en Jerez de la multinacional sueca y del complejo de Ikea Ibérica están paralizados desde ayer y sin presencia de obreros, y lo seguirán estando hoy y «hasta que la empresa se avenga a razones y se sienta a debatir todo lo que está ocurriendo, con turnos abusivos de trabajo, con la no aplicación del turno de verano o los artículos del convenio de la construcción en la provincia, en definitiva, con los incumplimientos de la ley».

El representante de CC OO informó ayer de que «los responsables de Ikea ya están informados de que sólo dejaremos que la obra siga si hay negociación». En esta situación, hasta el mismo Ayuntamiento estaría mediando para que el encuentro se llevara a cabo, según Trillo.

El líder sindical insistió ayer en su denuncia de que en los trabajos de Ikea «no hay normas, sólo se hace lo que quieren las subcontratas» que tienen empleados a unos 250 obreros de fuera de Jerez, algunos extranjeros, «mientras que no han dado trabajo a ni una persona de la zona». Para Trillo, «ellos pueden contratar a quien quieran, pero los trabajadores de aquí tienen que tener el mismo derecho a poder beneficiarse de esta construcción».