Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizJerez
Los representantes de las pedanías firmaron ayer acogerse a los créditos del decreto estatal. / LA VOZ
Jerez

Apoyo unánime al crédito para pagar a los acreedores, pero no al plan de austeridad

La oposición rechaza las medidas para sanear el Ayuntamiento «por su falta de claridad»

MARÍA JOSÉ PACHECO
| JEREZActualizado:

Todos los partidos políticos dieron ayer su apoyo unánime a la operación financiera por la que el Ayuntamiento de Jerez firmó ayer mismo con Cajasol un crédito de 3,2 millones de euros con el que pagará en un mes parte de la deuda atrasada a 150 acreedores. Sin embargo, ahí acabaron las avenencias durante el Pleno extraordinario celebrado ayer, ya que el equipo de Gobierno tuvo que aprobar en solitario, con el rechazo de PP y PSA y la abstención de IU, el plan de saneamiento con el que pretende parar la sangría de las arcas municipales y que era una de las condiciones para que se pudiera firmar el préstamo con el banco.

Ninguno de los partidos de la oposición quiso dejar de apoyar la operación para pagar a los proveedores, a los que hasta ahora no se les habían reconocido las facturas, pero tampoco quisieron dar «un cheque en blanco» respaldando un plan de saneamiento del que criticaron «su improvisación, su falta de claridad, el que no contenga medidas concretas y que ponga en peligro la prestación de servicios en la ciudad».

Así, este conjunto de siete líneas de acción para sanear el Ayuntamiento salió adelante sin el consenso y ni el «pacto de Estado local» que pedía el Ejecutivo, cuyo portavoz económico, Juan Manuel García Bermúdez, no pudo menos que reconocer ayer que habrá que esperar al plan de viabilidad a largo plazo para conocer con detalle las diferentes actuaciones, el calendario de implantación de las mismas y los mecanismos de seguimiento. Es más, el socialista dejó bastante clara la finalidad del plan de saneamiento que se llevó ayer al Pleno al afirmar que «es el documento que demuestra que tenemos una política de ahorro que nos permitirá pagar las anualidades del crédito».

Por eso, con el objetivo de atacar los problemas de fondo del Ayuntamiento, ayer en la sesión extraordinaria también se votó de forma separada -a petición de IU- la propuesta de elaborar en el plazo de tres meses ese llamado plan de viabilidad que sí dé una solución definitiva a este lastre económico de décadas del que ayer todos los partidos se esforzaron por responsabilizar al contrario. En este sentido, García Bermúdez recalcó que «la deuda de unos 300 millones se generó en 25 años», aunque con «cifras records» recientes -en alusión al periodo de la presidenta del PP, María José García-Pelayo, como alcaldesa-.

Desde el PSA, Rosario Rodríguez rebatió que «200 millones de la deuda no son heredados, son fruto de los cuatro años de gobierno de Pilar Sánchez», una afirmación que compartió la dirigente popular, que lamentó que el crédito aprobado ayer sólo cubra el 1% del total que se debe. Por su parte, el edil de IU, Joaquín del Valle, repartió las culpas y apuntó que la pasada legislatura, la de los diferentes pactos entre partidos, «fue criminal porque por gobernar fueron capaces de todo».

Sea como fuere, y con el apoyo de IU y el voto en contra de PP y PSA -que creen que el plan de viabilidad es rehén del de saneamiento- se dio luz verde a elaborar ese plan de viabilidad. También la modificación de créditos del presupuesto General 2009 contó con los votos favorables del PSOE y las abstenciones del IU, PSA y PP, mientras que el reconocimiento de créditos en el presupuesto general de 2009 se aprobó con los voto afirmativos del PSOE y las abstenciones del resto.