Cuba celebra el 56 aniversario del hito de la revolución sin Fidel al mando por tercera vez
Su hermano, Raúl Castro, festejará en Holguin el asalto al cuartel Moncada y su presidencia de la isla sin haber conseguido los "cambios estructurales" que prometió
LA HABANAActualizado:Este domingo se cumplen 56 años del asalto al cuartel Moncada - hito previo histórico de la revolución - y tres años de la última aparición pública de Fidel Castro, que dejó por enfermedad el mando ejecutivo pero rige aún los destinos de la isla junto con su hermano Raúl, sin que el sistema se haya desmoronado, como auguraban sus adversarios, ni haya cambiado en lo fundamental.
Analistas, diplomáticos e incluso opositores coinciden en que el régimen parece aún sólido, a pesar de ser bicéfalo y vivir una de sus peores coyunturas económicas, que obligó al gobierno a rebajar del 6% al 2,5% su meta de crecimiento de 2009. "Hay que reconocer la estabilidad del modelo totalitario. Todo ha seguido atado y bien atado", según afirmaba Elizardo Sánchez, portavoz de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional.
Hay perennes discusiones en La Habana sobre si manda más Fidel o Raúl, y, si alguien comete el error de preguntar en qué medida manda cada uno, las respuestas divergen hasta el infinito. "La última palabra la tiene Fidel", afirma Sánchez, siguiendo la opinión mayoritaria entre los cubanos, aunque no entre los extranjeros radicados en la isla.
Gobernante consolidado
Aunque en todos los temas las opiniones son igual de diversas, hay quienes aseguran que Raúl Castro ha consolidado su poder en estos tres años reemplazando afines a Fidel por sus propios fieles, procedentes la mayoría de las filas militares que dirigió por décadas.
"Muchos rojos de Fidel han sido reemplazados por verdes de Raúl", dijo un diplomático, aludiendo al verde olivo del uniforme militar.
Un diplomático latinoamericano asegura que es irrelevante quién manda, pues lo real es que nada decisivo ha cambiado, se siguen violando los derechos políticos -como anotó la Unión Europea en junio pasado- y aumenta el deterioro de indudables logros sociales anteriores, como la salud y la educación universales.
Para muchos cubanos, poco o nada ha mejorado desde 2006, aunque algunos se ilusionaron cuando Raúl prometió "reformas estructurales" y derogar muchas prohibiciones absurdas que rigen en la isla (sin traicionar al socialismo, desde luego).
Numerosos observadores creen que las reformas se frenaron porque la economía cubana, deprimida desde hace décadas, fue machacada por la crisis internacional y tres huracanes que causaron en 2008 pérdidas por 10.000 millones de dólares.