Zapatero anuncia que la Ley del Aborto irá a las Cortes como estáPara Rouco es claramente inconstitucional
El Gobierno desoye las críticas del Consejo Fiscal, ignora la división de los jueces y da luz verde al polémico texto
| COLPISA. PALMA DE MALLORCA ÁVILA Actualizado: GuardarJosé Luis Rodríguez Zapatero no asumirá ni una sola de las críticas planteadas por el Consejo Fiscal a la ley del aborto. Y tampoco la división mostrada por el Consejo General del Poder Judicial en su pleno del jueves le hará desistir de los polémicos preceptos contenidos en el anteproyecto legislativo. «Con respeto a lo que hayan dicho o no hayan dicho los órganos consultivos, el Gobierno remitirá al Parlamento la ley de interrupción voluntaria del embarazo en los términos que ya son conocidos», avisó al término del Consejo de Ministros celebrado ayer en Palma de Mallorca.
La intención del Ejecutivo es sacar adelante la ley en el último período de sesiones de este año y fuentes gubernamentales aseguran que existe disposición a dar marcha atrás en aspectos muy concretos de la propuesta; fundamentalmente, en los que permitirían que las menores de entre 16 y 17 años puedan abortar sin conocimiento paterno. Pero Zapatero dejó claro que si hay cambios será durante la negociación parlamentaria, porque el Gobierno no se moverá un ápice del texto elaborado por el Ministerio de Igualdad.
El hecho de que, por primera vez, el Poder Judicial haya sido incapaz de llegar a un acuerdo sobre la viabilidad jurídica de una norma tampoco mereció reflexión especial del presidente.
«Respeto» a Dívar
La portavoz del órgano de gobierno de los jueces, Gabriela Bravo, dio a entender que las discrepancias que impidieron aprobar el informe (preceptivo pero no vinculante) no son sino un reflejo de las posiciones encontradas que la nueva legislación provoca en la sociedad. Una lectura obviada por Zapatero. «El Gobierno tiene un compromiso y lo va a cumplir», zanjó.
El resultado del debate producido en el seno del Poder Judicial no es en absoluto ajeno a la composición de este órgano negociada por Zapatero y Rajoy hace un año. El jefe del Ejecutivo optó (para gran disgusto de muchos de los suyos) por un presidente, Carlos Dívar, de profundas convicciones religiosas.
Fue la abstención de Camps y el voto en contra de Dívar lo que impidió que el dictamen saliera adelante y es probable que en el futuro se produzcan situaciones similares. Hay que tener en cuenta que el Ejecutivo prepara ya la reforma de la ley de libertad religiosa. Zapatero, con todo, se ratificó hoy en su apuesta. «Siempre he respetado a los órganos institucionales y respeto a su presidente, que tiene derecho a tener su criterio sobre cualquier cuestión», alegó el presidente Zapatero.
El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y arzobispo de Madrid, monseñor Antonio María Rouco Varela, manifestó ayer que el anteproyecto de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo elaborada por el Gobierno socialista «es inconstitucional».
«Mi opinión personal, más allá de mi condición de cardenal, de obispo o de sacerdote, sino como jurista que se ha dedicado a la enseñanza del Derecho durante muchos años, es que es inconstitucional, claramente», subrayó el arzobispo en respuesta a la decisión del Consejo General del Poder Judicial de no informar sobre el texto del Ejecutivo por falta de consenso y tras registrarse además un inédito empate en las votaciones que se celebraron.
Monseñor Rouco Varela realizó estas declaraciones en la clausura del curso celebrado en Ávila.