"Me inspiro fregando o corriendo"

-¿Por qué muere usted, además de por Serrat?

-Por las sardinas al espeto, por una olla de berza y por la playa.

-En Madrid será entonces como un pulpo en un garaje.

-En Madrid no hay tiempo ni para sentirse diferente.

-¿Cómo se come una chirigótica haciendo footing por el Retiro?

-Eso forma parte de mis contradicciones. Me tranquiliza y me inspira. La mitad de las cosas de la chirigota se me ocurren corriendo o fregando. Además está el remordimiento de conciencia por las cervecitas y la barriguita, aunque eso ya no lo compensa nada. Barriguita... ya es una barriga de pureta por derecho.

-¿Cuándo dejarán de ser Las niñas?

-Hace tiempo que dejamos de serlo. Hay ya muchas chirigotas de niñas que son mucho más niñas que nosotras, aunque nos encanta que nos lo digan. Igual nos tienen que poner La chirigota de las puretas. Creo que aún no ha llegado ese momento -ríe-.

-¿Cuál es su momento siesa?

-Muchos. Más bien habría que preguntar cuál es mi momento enrollá. Siesa cuando me pongo nerviosa, o sobre todo cuando tengo sueño. Como un niño chico, no quiero saber de nadie.

-¿El último chiste que no le hayan entendido?

-Muchas veces digo barbaridades que la gente no entiende. Por ejemplo, estaba morsegando a un tío muy buenorro y le dije algo así como que «lo cortés no quita lo caliente». Y no lo cogió. Se quedó mirándome con cara de qué vulgaridad. Digo lo primero que se me pasa por la cabeza y así me va.

-¿Se ve con chirigóticas en el London Coliseum?

-No, pero puede pasar. Todo esto es muy surrealista. Una vez nos buscaron un bolo en Biarritz en un congreso de neurocirujanos... Así que puede ocurrir cualquier cosa. El problema de exportar esto es el idioma, aunque como dice Antonio Álamo, es una cosa tan marciana que igual en un país del norte les parece algo estupendo y vanguardista. De momento, hemos tenido mucho público latino en Madrid y conectan perfectamente. Si se adapta bien, se puede exportar.

-Lo tendrán difícil en Rumanía después de su tipo de hace dos años.

-Imagínate. Se enfadaron mucho. Nos dijeron xenófobas y racistas cuando nuestra intención era la contraria. Claro, imagina a un inmigrante rumano que va a Youtube y... Creo que allí somos personas non gratas.

-¿Qué queda por inventar?

-El antibiótico que se pueda tomar con alcohol. ¿Se puede tomar con cervecitas o no? Ese es el gran misterio del ser humano.

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