El conflicto del Marco se enquista

Hay momentos en los que es mejor estar unidos, aunque las diferentes partes puedan perder algo de sus pretensiones, pues si cada uno tira para un lado, al final la cuerda puede acabar rompiéndose. La espiral de problemas atraviesa el Marco de Jerez está provocando mucha inestabilidad.

A los problemas provocados por los excedentes que arrastraba el sector, con la vendimia a la vuelta de la esquina, se une ahora la difícil situación que atraviesa la patronal bodeguera después de que se produjese la salida de Mauricio González-Gordon de la presidencia de Fedejerez, que ha sido sustituido por una comisión compuesta por tres bodegas.

Entre tanto, los productores dieron un paso al frente al final de la pasada semana para proponer medidas que puedan sacar al sector de la crisis, que a su vez trasladaron a los bodegueros para buscar el consenso pedido desde el Gobierno andaluz.

Cuando la Junta pidió un mayor compromiso de todos los subsectores para proporcionar las ayudas al Marco nadie podía pensar que la situación iba a acabar derivando en problemas mayores.

Sin embargo, creo que toda esta controversia debe llevar a un punto de inflexión para poder establecer una hoja de ruta del conflicto, pues de lo contrario, tanto productores como bodegueros se encontrarán en años venideros con los mismos problemas que ahora pueden quedar aplazados.

Hace unos días hablaba con varios productores que se temen lo peor. Algunos ya no ven otra solución que arrancar cepas, si la situación no toma otros derroteros porque los costes superan con creces a los previsibles ingresos, que a su vez aún están en el aire mientras que no se cierre el precio de la uva. Habrá que esperar acontecimientos pero la cosa no pinta nada bien para nadie.