Los derribos en San Juan de Dios podrían comenzar en una semana

El delegado de Vivienda e Infraestructura, Antonio Fernández, trató de mandar ayer un mensaje de tranquilidad después de la denuncia de los vecinos de San Juan de Dios por el estado desamparo en el que se encuentran y por el peligro que suponen los dos edificios abandonados que perviven en la barriada.

Fernández dejó claro que el Ayuntamiento es plenamente consciente de la situación de esta zona, e hizo hincapié en que «los vecinos están perfectamente informados de todos los pasos y todos los procedimientos que estamos llevando a cabo».

En este sentido, el delegado de Vivienda e Infraestructuras anunció ayer que los trámites para poder acometer el retrasado derribo de los dos edificios abandonados -y de los que ya se han marchado las últimas familias que permanecían allí- «está a punto de culminar, por lo que no tiene mucho sentido, ni procede, que pongamos vallas cuando se van tirar de inmediato los edificios».

Fernández ahondó más en la información y se aventuró a afirmar que en una semana todo el proceso podría estar terminado para poder intervenir directamente y proceder al derribo de los dos inmuebles abandonados y que son el motivo de las quejas de los vecinos porque son pasto de incendios, saqueos, actos vandálicos y ratas. Así, el delegado, además de recalcar que «la titularidad de los bloques no es del Ayuntamiento», recordó que todos los trámites se están llevando «por la vía de urgencia». Además, añadió que el proceso está tan avanzado que «hasta está adjudicada ya la demolición a la empresa Juan Romo a través de los fondos del Plan Zapatero».