Banesto aboga por la prudencia a pesar de deslucir en 77 millones su beneficio del primer semestre

Banesto apuesta por la prudencia. La entidad prefirió destinar 77 millones de sus ganancias del primer semestre a provisiones voluntarias como colchón ante la situación económica. Tras este movimiento, el banco alcanzó un beneficio neto de 409,5 millones de euros, lo que supone un 8,9% menos de lo registrado en el mismo periodo de 2008.

La entidad presidida por Ana Patricia Botín resaltó que el «deterioro» de la economía provocó un aumento de la morosidad, que alcanzó el 2,32% (casi el triple que hace un año), una cifra que posiblemente alcance el 3% al cierre de 2009, según las estimaciones de Botín, quien aseguró ayer que el dato puede considerarse positivo, ya que está por debajo del de la competencia y además, el banco cuenta con provisiones genéricas hasta 2011.

La entidad ve los resultados de los seis primeros meses del año «satisfactorios y sólidos» y afirma que superan todas las expectativas y objetivos propuestos. Este optimismo viene dado, en parte, por el aumento en la captación de clientes, 215.000 más, que aportaron 144.000 nóminas a la entidad, además de los 49.750 nuevos clientes entre empresas y autónomos.

El banco afirmó que «crece la tendencia a una menor demanda de crédito», algo que unido a la política de «crecimiento selectivo» (más rigor a la hora de prestar) se tradujo en 77.524 millones de euros en créditos concedidos, un 0,5% más. Banesto reduce poco a poco su cuota en el negocio hipotecario, que hoy está en el 3,3%.