Una distracción pudo provocar el vuelco mortal de un autobús con destino a Cádiz

Una distracción al volante, unido a un exceso de velocidad, es la principal hipótesis que baraja la Guardia Civil que explique el accidente de tráfico ocurrido en la madrugada de ayer, en la salida de la A-4 hacia la localidad sevillana de Carmona. Un autobús de la empresa Socibus SA, que cubría el trayecto entre Madrid y San Fernando, se salió de la vía en el inicio de una curva con poca pronunciación (exactamente en el punto kilométrico 504,100) y volcó por su lateral izquierdo. Eran las 4.18 horas de la mañana y se dirigía a Carmona para hacer una parada. De los 38 viajeros, la mayoría turistas que venían a la provincia a pasar unos días de vacaciones, falleció una joven de Logroño y otras 26 personas resultaron heridas.

El autobús salió a las 21.30 horas de Madrid y tenía prevista la llegada a La Isla sobre las 6.30 horas, después de hacer parada en Jerez, El Puerto y Cádiz. El vehículo siniestrado tiene sólo un año de antigüedad y el conductor había tomado el relevo una hora antes en la localidad cordobesa de Pedro Abad. La ruta entre Madrid y Cádiz la realizan dos chóferes, de tal forma que uno hace el trayecto desde la capital madrileña a Córdoba y otro completa el tramo hasta San Fernando. Ambos realizan el relevo con el descanso cumplido, confirmaba el consejero delegado de Socibus, Ángel Juan Pascual, quien también preside la Cámara de Comercio de Cádiz. Pascual subrayó que este siniestro es el primero que sufre la empresa en 17 años de servicio.

Entre los heridos estaba el conductor, que necesitó ser intervenido de una fractura abierta en una de sus piernas. En un primer momento fue llevado al hospital Virgen del Rocío, pero al no presentar un estado grave pudo ser derivado al centro hospitalario de Jerez, donde reside. El director gerente de la compañía, José Luis Pérez Pita, detalló que el trabajador tiene 60 años, posee «mucha experiencia» y lleva ocho años en Socibus después de una larga trayectoria en otra compañía. Tras superar la operación con éxito, trata de recuperarse anímicamente. «Está muy afectado y aunque hemos podido hablar con él, hemos preferido dejar que pasen unos días antes de preguntarle por lo ocurrido», señalaba Pérez Pita.

La única víctima mortal se llamaba Manuela García Gomara y tenía 24 años. Viajaba hacia Cádiz de vacaciones con su novio, que estaba en el asiento contiguo al suyo cuando se produjo el siniestro. El joven presenció cómo su pareja fallecía en el acto a consecuencia del fuerte impacto tras el vuelco.

Socibus facilitó el traslado de los padres de la víctima desde Logroño a Sevilla a través de un taxi que les llevó hasta Madrid y allí pudieron tomar un AVE hasta la capital andaluza. El cadáver fue enviado al Instituto Anatómico Forense sevillano para la práctica de la autopsia y es allí donde les será entregado a sus familiares.

Los 26 heridos fueron trasladados a tres hospitales de la ciudad hispalense -Virgen del Rocío, Macarena y Valme- a través de once dispositivos de atención a urgencias y emergencias que se desplazaron al lugar del accidente. En un principio se informó que cuatro de ellos habían ingresado en estado grave y que entre ellos había un niño de dos años, una ciudadana boliviana y un joven que sufría roturas en ambos brazos.

Sin embargo, la Delegación Provincial de Salud confirmaba al mediodía que 17 personas ya habían recibido el alta y que las otras nueve «presentan fracturas y contusiones de diversa consideración, pero se encuentran conscientes y en ningún caso su estado es grave».

Del accidente salieron ilesos 11 pasajeros, que fueron llevados en un primer momento al cuartel de la Guardia Civil de Carmona. La empresa Socibus fletó dos autobuses y varios taxis para llevarlos a sus lugares de destino. A algunos los trasladaron a localidades que estaban fuera del itinerario del viaje como un grupo de siete jóvenes que iban a unos apartamentos de Rota. «Les hemos llevado adonde nos han pedido, tanto a los que salieron ilesos como a los que han recibido el alta. Ninguno ha pedido el regreso a Madrid», explicaba el director gerente de Socibus, quien además confirmaba que les van a reembolsar el dinero del billete y les ofrecerán otro «completamente gratis».

Al cierre de esta edición, continuaban hospitalizados nueve heridos, por los que no se teme por su vida. Desde Socibus mostraron su pena por el fallecimiento de la joven, aunque también incidieron en que el vehículo está equipado con «las últimas tecnologías y la máxima seguridad», como cinturones de seguridad en los asientos y anclajes especiales a la estructura, que impidieron una tragedia mayor.

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