Blanco se pone 'verde'
El ministro de Fomento aboga por la eficiencia y la sostenibilidad como ejes de las nuevas infraestructuras
| COLPISA. MADRID MADRIDActualizado:«El futuro se llama transporte sostenible, y mi compromiso con esta idea no es retórico». Así de firme se declara el ministro de Fomento, José Blanco, quien se ha marcado como prioridad y eje central de su gestión el ahorro energético, dentro del espíritu conocido como cambio de modelo productivo.
Blanco ha puesto a trabajar a todas las empresas que de él dependen en planes para maximizar la eficiencia. Ya ha anunciado iniciativas verdes y se propone modificar el Plan de Infraestructuras (PEIT) para, junto a las autonomías y los agentes del sector, «luchar con determinación contra el cambio climático». «No es una opción, es una obligación de todos los Gobiernos», sentencia. Estas son algunas de las primeras actuaciones de la nueva política de Fomento.
Conducción económica: El tren, protagonista de las grandes inversiones de Fomento en los próximos años, trabaja a marchas forzadas para reducir su consumo energético. En Renfe y Adif se ha puesto en marcha un plan 2009-2012 que tiene como punta de lanza dos programas. El primero, el de la conducción económica, que ha supuesto una mejora del 9,5% en el gasto en electricidad en el corredor Ave Madrid-Sevilla, por el aprovechamiento de energía cinética y de la orografía del terreno, y logrado que entre el 35% y el 54% del recorrido se produzca sin consumir. A esto se suma un novedoso sistema que permite generar electricidad cada vez que el maquinista frena, basado en la energía eólica y que permitirá devolver a la red hasta el 10% del consumo del Ave.
Paneles solares y salvapantallas: Adif maneja 97 medidas técnicas y de gestión en su programa de eficiencia; desde nuevos criterios de construcción en las estaciones, con paneles solares, a la concienciación de la plantilla para apagar o dejar en bajo consumo sus 8.000 ordenadores, en los que el salvapantallas será ecológico. También introducirá estos criterios en la conducción de su parque automovilístico y en el uso del aire acondicionado o la calefacción. Trabaja en un manual de buenas prácticas interno y en la instalación de paneles fotovoltaicos con los que iluminar estaciones, aparcamientos o locales.
Vuelos en línea recta: Blanco también pretende ahorrar energía en el aire, y se ha puesto de acuerdo con su compañera en Defensa, Carme Chacón. Juntos han aprobado el uso de espacios aéreos, reservados hasta ahora al Ejército, para que los aviones comerciales den menos rodeo. Aena ha puesto en marcha un total de 19 medidas de reestructuración del espacio que supondrán un ahorro de 62 millones de euros anuales en queroseno y de 600.000 toneladas de CO2.
Autobuses y cheques: Fomento pilota el denominado Plan Vive de financiación de autobuses de baja emisión, dotado con 236 millones en 2009 y 2010, y que servirá para retirar de las carreteras 2.100 vehículos antiguos. Al programa pueden acogerse autobuses urbanos o interurbanos, de corto o largo recorrido, de transporte regular o discrecional. Otro de los planes de Blanco, aunque en realidad y como el anterior depende de su colega Elena Salgado, pasa por el denominado cheque transporte, consistente en una rebaja fiscal para las empresas que faciliten el desplazamiento de sus empleados en medios de transporte público. Previsiblemente, entrará en vigor a mediados de 2010.
Autovías y ciudades: Fomento pretende reducir en un 50% el flujo luminoso en autovías y autopistas. Este año se va a actuar en 550 instalaciones de 19 provincias, con un presupuesto de 19 millones de euros. También tiene previsto impulsar la construcción de carriles bus y mejorar los núcleos de cercanías. Los municipios contarán en 2010 con un fondo de 5.000 millones para abordar obras de eficiencia energética y medioambiental.
La crisis y el deterioro de las relaciones entre empresarios y representantes sindicales mantienen prácticamente paralizada la negociación colectiva en el metal, algo que no había ocurrido nunca. De los 16 convenios provinciales a renovar en 2009, sólo se han suscrito dos, nada significativos por su ámbito de aplicación. Son los de Salamanca y Cuenca, que cubren a 3.900 trabajadores.
El metal ocupaba a 1.073.600 personas en el primer trimestre de 2009, tras una caída del 14,2% en relación con el mismo periodo de 2008. En números absolutas, la pérdida fue de 178.100 puestos de trabajo. Otras cifras que demuestran el deterioro del sector reflejan descensos del 37,8% en la actividad productiva, del 37,3% en las exportaciones, y del 41,1% de las importaciones.
Los 34 convenios provinciales revisados contemplan una subida salarial media del 2,92%, pese a que la patronal Confemetal instó a sus asociados a revisar a la baja los acuerdos suscritos. Argumentó que se habían firmaron en época de bonanza económica.
A fecha 30 de junio, el número de trabajadores con convenio cerrado se limitaba a 617.700. El acuerdo de Salamanca, con vigencia de un año, recoge una subida salarial del 2%; el de Cuenca durará dos años, con un incremento en 2009, del 2% y en 2010, del índice de precios al consumo previsto más un 0,9%. Ambos aumentos se escapan de las recomendaciones de la patronal.