El centro se cierra al tráfico para fortalecer el comercio local

Las calles La Plaza, Arroyuelo y Nuestra Señora de Los Remedios, que conforman el centro de la ciudad, queda desde el 1 de julio cortadas al tráfico dentro del progresivo plan de peatonalización que está llevando a cabo el Ayuntamiento de Chiclana. La Delegación de Tráfico del Ayuntamiento de Chiclana lo tiene todo preparado. Cartelería, señalética y la presencia de agentes para informar in situ a los conductores conformarán el dispositivo que se pondrá en marcha a partir de mañana.

Las principales alteraciones en la vida diaria de los chiclaneros será la imposibilidad de cruzar con su vehículo la calle La Plaza, una de las principales arterias de la localidad. Los conductores que se desplacen por la Alameda del Río procedentes de La Banda o la avenida Reyes Católicos deberán continuar por la calle Iro hasta desembocar en el Puente VII Centenario. Por La Plaza y el resto de viales del centro, sólo podrán circular los autobuses urbanos y los taxis, así como los vehículos de emergencia y los residentes propietarios de garajes en la zona.

La medida de cortar el tráfico en estas calles forma parte del plan que hace una década puso en marcha el Ayuntamiento para potenciar y cohesionar el denominado Centro Comercial Abierto en el municipio. Ratificada en el Consejo Económico y Social, las asociaciones de empresarios, hosteleros y comerciantes apoyan su ejecución, aunque a título individual algunos minoristas han expresado en las últimas semanas su temor a que la eliminación del tráfico pueda reducir su clientela durante los primeros meses de cortes. En cualquier caso, el Ayuntamiento ha insistido en que una de ideas de cerrar el tráfico en el centro es la de potenciar una especie de centro comercial abierto en la zona y, por tanto, aumentar la cuenta de resultados de los comerciantes locales.