Una relación marcada por la desconfianza
El enfrentamiento entre Londres y Teherán por las elecciones
| LONDRES Actualizado: Guardar¿Es Reino Unido responsable de los males de Irán? Éste era ayer uno de los temas de debate de las tertulias radiofónicas en el país anglosajón. Los oyentes diferían, pero de lo que no hay duda es que varios episodios protagonizados por la Corona británica han hecho que los persas vean al Gobierno de Londres con malos ojos. «Hay una creencia muy enraizada entre la población que considera que el Reino Unido nunca es pasivo y es siempre enrevesado. Es una mezcla de historia y de la actual implicación británica en Irán», según Rosemary Hollis, la experta en Oriente Próximo de la City University de Londres.
Aunque Irán nunca se convirtió en colonia, en 1907 se dividió en dos esferas de influencia: el norte era controlado por Rusia, mientras que el sur y el este por el Reino Unido. Antes, en 1813, un diplomático británico, sir George Ouseley, fue el responsable de un tratado que obligó a Persia a ceder territorio a Moscú, algo que aún hoy se ve como una humillación. Reino Unido también fue clave en la demarcación de la frontera con la India en el siglo XIX.
La intervención británica no acaba aquí. En los años veinte del siglo pasado el Ejército ayudó a catapultar en el trono a Reza Pahlevi. Pero si hay algo que reforzó con creces la desconfianza hacia el Reino Unido es el golpe orquestado conjuntamente con EE UU contra el Gobierno elegido en las urnas de Mohammed Mossadeq en 1953. Este líder quería nacionalizar la compañía de petróleo anglo-iraní, BP, en la que Reino Unido controlaba una buena parte.
revive una historia de desencuentros