ADIF retocará sus alegaciones para que se construya en Santa Clara

No ha desbloqueado completamente el problema pero sí ha arrojado algo más de luz. El final del túnel en el que están atrapados los vecinos de la barriada José Antonio está un pasito más cerca. La reunión entre el alcalde, Enrique Moresco, el delegado del Gobierno de la Junta, Gabriel Almagro, y representantes vecinales celebrada ayer ha servido para que ambas administraciones hayan acercado posturas y hayan encontrado una solución para que la construcción en el entorno de la ermita de Santa Clara de las 190 viviendas en las que se realojarán los habitantes del barrio se agilice aún más.

A todo esto, y tras negociaciones con sus representantes, ADIF se ha comprometido a presentar en breve un documento que aclare el sentido de su alegación contra la desafectación realizada por la Consejería de Medio Ambiente de la vía pecuaria que atraviesa la zona.

Almagro y Moresco coinciden en que ADIF ha confirmado que su alegación va únicamente dirigido a que se le reconozca la titularidad de la antigua vía del tren que atravesaba el entorno de Santa Clara pero que en ningún caso ocupa la parcela en la que estarán ubicadas las viviendas. El escrito de ADIF dará vía libre a Medio Ambiente para enviar al Ayuntamiento un certificado de firmeza de la desafectación total –y no parcial como se había conseguido hasta ahora– de la vía pecuaria, que a su vez permitirá aprobar cuanto antes el proyecto de reparcelación y conceder la licencia de obras. Una vez que la Junta de Gobierno Local dé luz verde a ambos trámites –lo que podría producirse el próximo jueves–, sólo restará la adjudicación de las obras.

Protestas

El primer edil portuense y el delegado del Gobierno de la Junta insistieron igualmente en que esta solución impedirá que la alegación de ADIF contra la desafectación –el cual no se retirará pese a las aclaraciones– no derive en un contencioso administrativo con la Junta que paralice indefinidamente el proyecto de Santa Clara.

Desde la administración autonómica entendían que el certificado de firmeza administrativa de la desafectación parcial de la vía pecuaria que ocupa la zona era suficiente para que la edificación de las casas siguiera su curso, algo que no compartían los técnicos municipales, puesto que la antigua vía del ferrocarril se asentaba sobre unos terrenos que están en la misma unidad de ejecución que la ubicación de las viviendas.

Por otra parte, los vecinos valoraron las novedades con «satisfacción moderada» dada la «desconfianza» que sienten a estas alturas «después de tantas promesas incumplidas». En este sentido opinan que «los avances se han producido por nuestras movilizaciones», por lo que advierten que «volveremos a encerrarnos si nos engañan». Por último, incidieron en «los daños psicológicos que les han provocado tantos retrasos» en esta cuestión.