Días de blanco satén
La Pasarela Gaudí más mediática que se recuerda congrega a Luis Sastre, Clemente Lecquio y Eugenia Silva, entre otros
Actualizado: GuardarHubo novias y novios para exportar, pero la cosa no acabó en boda. «Soy demasiado joven para casarme», declaró Clemente, el primogénito de Alessandro Lequio. «De eso no hablo», zanjó Eugenia Silva cuando alguien le preguntó por un futuro matrimonio. La Pasarela Gaudí Novias, celebrada esta semana en Barcelona, ha demostrado de nuevo que los famosos se pueden vestir con ropa nupcial sin necesidad de casarse con nadie; menos aún con la prensa.
Durante cuatro días, Barcelona se ha dado un auténtico festín de blanco satén, chantilly y tul ilusión. Abrió el vals Amaia Salamanca, de la mano de Pronovias, y Rosa Clará se encargó del plato fuerte del banquete con un desfile dedicado a los años veinte y treinta con los flecos como novedad, seguido de una fiesta cuajada de estrellas que tuvo como principal madrina a Inés Sastre, una mujer que, malgré tout (se divorció al año y medio de casarse) todavía cree en el amor conyugal. «No cierro las puertas a nada en esta vida -dijo la modelo, sin desvelar si está saliendo con alguien-. Ni a tener otro hijo, ni a casarme de nuevo». Inés es madre de Diego, un niño de tres años, al que llama Puchi y que ya habla con soltura español y francés. «E incluso inglés, cuando se enfada».
Con un elegante y brillante vestido negro de Clará, la modelo celebró con la prensa su duradera unión (ahí sí) con Lancôme, firma de cosméticos con la que acaba de renovar contrato por otros tres años, lo cual suma 16 temporadas ininterrumpidas y establece un récord mundial que supera de largo el que ostentaba Isabella Rossellini. Con la satisfacción que da tener las lentejas aseguradas, Inés confesó estar deseando «que llegue julio para descansar en Sotogrande con mi niño». Y como no cierra las puertas a nada, esperar... «a ver qué me trae el verano».
Recién casados por la Iglesia y por Rosa Clará, a la fiesta acudieron también Fran Murcia (ex baloncestista y ex marido de Lara Dibildos) y Carolina López. «Es la mujer perfecta para mí», aseguró Murcia mirando a su esposa, a la que saca más de cuarenta centímetros de altura. «Lo más emocionante de nuestra boda -contó Fran- fue verla entrar a ella, que ya venía llorando. Es que Carolina es de Lucena y se emocionó mucho cuando vio a todo su pueblo en las calles». Casado en primeras nupcias por lo civil, Fran se ha convertido en esta segunda vuelta al matrimonio eclesiástico. «Yo era escéptico, pero ya no. Una boda por la Iglesia es algo mucho más bonito y emotivo. Se lo recomiendo a todo el mundo».
Al que no van a cazar de momento, ni por la Iglesia ni por lo civil, es a Darek Miroslaw, ex novio de Ana Obregón, que acudió a la misma fiesta del brazo de su inseparable mánager y «sólo amiga» Susana Uríbarri. Darek acaba de publicar un libro titulado Mis secretos. Pero que nadie se haga ilusiones porque no habla de intimidades sino de cómo mantenerse en forma. Lo suyo es el fitness. Bueno, y los juicios con Ana Obregón. Aún le queda uno, previsto para el 22 de junio. Ése en el que ella le pide el dinero que le prestó. «Creo que Ana quiere retirar la demanda -dijo Darek-, pero prefiero que no lo haga porque lo pienso ganar. A mí ella no me prestó ningún dinero. Simplemente pagó viajes y lujos porque ella así lo quiso, yo no ella quiso. En todo caso, si tengo que pagar (unos 60.000 euros), pues pago. De Ana sólo me quedan buenos recuerdos. Lo malo lo he olvidado. No soy rencoroso ni vengativo. Cosa que ella no puede decir».
María Palacios, flamante esposa de Lequio, también pasó por Gaudí Novias, igual que Laura Sánchez, que desfiló para Raimon Bundó, y Eugenia Silva, para Yolan Cris. Pero el auténtico bombazo lo dieron Victorio & Lucchino al fichar como modelo a Clemente Lequio, que a sus 21 años sólo había desfilado una vez, y en Milán.
Su celebérrima mamma, Antonia Dell'Atte, no acudió a verle, «pero me apoya y me ha animado mucho», dijo el chaval.