
Líbano busca espías israelíes en la zona sur controlada por España
Una mala interpretación obliga a Defensa a desmentir que militares españoles participen en el operativo
| COLPISA. MADRID Actualizado: GuardarLas Fuerzas de Seguridad de Líbano han puesto en marcha un dispositivo para desmantelar una presunta red de espionaje que trabajaría para Israel en el sur del país, la zona controlada por las tropas españolas integradas en la misión de Naciones Unidas (FINUL) que trata de mantener la paz. Ese dispositivo, que ya ha practicado una veintena de detenciones de sospechosos, supone un problema para el destacamento español, porque ha levantado muchos recelos entre los habitantes de la comarca.
Así se lo expuso el general de brigada José María Prieto Martínez, jefe del destacamento español en Líbano, a la ministra de Defensa, Carme Chacón, con la que mantuvo una videoconferencia desde la base de Marjayún. Al dar novedades a la ministra, el general le explicó que, «durante la semana, hay que destacar que se ha continuado con estas labores que se están haciendo de búsqueda de la célula de espionaje israelí. Ha habido varias detenciones. Lo que quiere decir que en la zona provocan siempre una sensación de recelo porque piensan y creen que cuando alguien se pone cerca está buscando información que puede ser utilizada de forma hostil para ellos».
Algunas agencias de noticias interpretaron de estas palabras que las tropas españolas participan en las labores de busca y captura de los supuestos miembros de la red que trabaja para Israel. De inmediato, la ministra Chacón negó ese extremo y pidió disculpas minutos después en los pasillos del Congreso por la confusión generada. Las fuerzas españolas, al estar integradas en la misión de la FINUL, realizan labores de interposición entre las tropas libanesas y las israelíes para evitar nuevos enfrentamientos armados, por lo que romper su posición de neutralidad podría provocar un delicado conflicto internacional.
El propio jefe de la misión en Líbano quiso aclarar en un comunicado sus palabras y dejó claro que «ni las fuerzas españoles ni las fuerzas de la FINUL han participado en nada relacionado con operaciones contra las células de espionaje israelíes». El general Prieto Martínez señaló que su comentario durante la videoconferencia hacía referencia «exclusivamente» a las Fuerzas Armadas y de Seguridad libanesas.
Una red contra Hezbolá
Según diversos medios locales, la red de informadores que se había activado en el país del cedro tras la guerra entre el Ejército hebreo y las milicias de Hezbolá, acaecida en 2006, fue destapada en abril cuando los servicios de seguridad detuvieron a un ex general libanés, Adib Al Alam, que llevaba más de diez años reportando informes a Israel desde una agencia de viajes.
Días después, la investigación descubrió que la red había intentado infiltrarse en el poderoso dispositivo de la organización de Hezbolá, lo que hizo temer que Israel estuviera preparando un ataque inminente contra la milicia chií. El Gobierno del Líbano presentó el 21 de mayo una queja formal ante la ONU por lo que calificó de «una agresión contra la soberanía del Líbano».
Los presuntos agentes, cristianos y musulmanes, tenían como misión reunir información sobre las posiciones de Hezbolá, sobre grupos palestinos y militares libaneses, y se comunicaban con sus superiores israelíes vía satélite o mediante mensajes informáticos codificados. Viajaban a Francia, Turquía o Hungría con pasaportes falsos para comunicar sus informaciones y recibían formación en Israel.
En al menos tres ocasiones, reconoció entonces el general libanés Acharf Rifi, varios de los acusados huyeron a través de la frontera común, que se supone está vigilada por los 'cascos azules' de la FINUL, entre los que figuran soldados españoles.