La crisis disminuye el interés de los trabajadores en mejorar su colocación

El desplome del mercado laboral ha sembrado el miedo, entre los que en la actualidad tienen trabajo, a perder el empleo en un futuro más o menos próximo. En consecuencia, la inmensa mayoría prefiere dedicar su esfuerzo a conservar el contrato que disfruta antes que a embarcarse en aventuras desconocidas.

Prueba de ello, es que sólo el 5% de los 15,8 millones de asalariados existentes en España ha decidido apuntarse a la 'lista del paro' para encontrar un puesto más acorde con su intereses. Este grupo de trabajadores arriesgados representa únicamente el 17% de los demandantes inscritos en los Servicios Públicos de Empleo (antiguo Inem). Cuando terminó 2007, el ánimo era más elevado y la tasa de quienes pensaban progresar en su vida laboral llegaba al 30%.

Al cierre del mes de mayo había 4,9 millones de personas en el registro oficial. Es decir, el número de apuntados ya rondaba la mítica cifra de los cinco millones.