LA PREVIA DE LUIS LARA

La bandera de Japón

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Tras la victoria de ayer del Hércules ante el defenestrado y segundabesino Alicante el Xerez aún no es equipo de Primera, matemáticamente hablando. Un solo punto separa a los azulinos del ansiado teletransporte a la máxima categoría del fútbol español. Sólo debe conseguir una bandera de Japón, que es un punto.

Un puntito que le haga sumar 79 puntos y le haga conseguir el ascenso más largo del mundo. Que pejiguera y jartible está ya el tema de subir. Llevamos en Jerez varias semanas haciendo cábalas y números en relación con el ascenso y la cosa está poniéndose pesadita ya.

Confío en que va a ser esta tarde-noche. Pero si por mor del destino tampoco fuera hoy, no pasa nada. La semana que viene en Chapín, el Huesca se convertiría en la víctima propiciatoria para que se consiga por fín. De entelequia quimérica y utópica se puede calificar el hecho de que el equipo de Esteban Vigo no consiguiera subir. Tal es así la cosa que por la cabeza de ningún xerecista pasa la trágica idea de quedarse con la cara partida y yéndose pa la venta del nabo o pa los tubos.

El Tenerife va a salir, en un Heliodoro Rodríguez López abarrotado, con más gente que en la cocina de los Serrano a la hora de desayunar, a por todas, debido a que el anteriormente mencionado Hércules de Alicante le anda pisando los talones en la lucha por ser uno de nuestros compañeros de viaje a Primera.

De tremendo se puede calificar el colocón que podemos coger más de uno en cuanto finalice el partido en las Islas Afortunadas y la fortuna, valga la redundancia, nos termine sonriendo. El agua de los floreros, el de los altramuces, el líquido de frenos, el yodo, el espidifen, el listerine..., todo ello con o sin coca cola, va a ser poco para calmar la sed de fiesta y cachondeo de la parroquia azulina.

Yo estoy que no aguanto más. Me subo por las paredes. Estoy más desesperado que Spiderman en un descampado. Espero que Chema tenga que trabajar menos que la quijada de arriba. Que Francis y Mendoza sean dos puñales por banda con más peligro que Eva en un confesionario. Que Aythami y Crespí sean un auténtico frontón tengan más seguridad que toda la plantilla de Prosegur. Que Momo y Calvo vuelvan locos a los laterales tinerfeñistas y les hagan pasar una tarde más desagradable que un flatito de la niña del exorcista. Que Moreno y Bergantiños corten hasta la luz. Que Abel esté inspirado y con más imaginación que el niño de La Historia Interminable. Y que Bermejo siga siendo nuestro matador y tenga más peligro que los Gremlins en Valdelagrana.

FORZA XEREZ. Sí, sí, sí, lo vamos a conseguir...ya