Guardafronteras cubanos abordan una embarcación. / EFE
MUNDO

La Habana celebra su «triunfo» con la OEA pero rechaza regresar

Los disidentes creen que la organización ha cedido ante «la dictadura castrista»

| CORRESPONSAL. LA HABANA Actualizado: Guardar
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A diferencia de en otras ocasiones, la respuesta de Cuba a la histórica decisión de la Organización de Estados Americanos (OEA) de anular la resolución que mantuvo al régimen castrista 47 años fuera de su sombrilla fue casi inmediata, expresando alegría pero insistiendo en que La Habana no volverá y exige el levantamiento del embargo.

El presidente del Parlamento, Ricardo Alarcón, reiteraba ayer que era «un gran triunfo para los pueblos de América Latina y el Caribe, y también para el pueblo de Cuba. Pero lo que ha ocurrido no modifica en nada lo que Cuba pensaba anteayer, ayer y hoy».

El miércoles, la televisión oficial ya se alegró por la victoria simbólica, pero reiteró que la isla no volverá mientras se mantenga el bloqueo estadounidense. «Cuba no ha pedido, no quiere regresar a la OEA llena de una historia tenebrosa y entreguista, pero reconoce el valor político, el simbolismo y la rebeldía que entraña esta decisión impulsada por los gobiernos populares de América Latina», dijo un presentador.

Mientras, miembros de la oposición protestaron por lo que consideran una cesión de los 34 cancilleres americanos «ante la dictadura castrista». Sin embargo, analistas más ecuánimes aseguran que el texto expresa claramente que «la participación de Cuba en la OEA será el resultado de un proceso de diálogo iniciado a solicitud del Gobierno y de conformidad con las prácticas, propósitos y principios de la organización».

Para cumplir esos principios, el Ejecutivo de Raúl Castro debería acogerse a la Carta Democrática que exige cumplir «elementos esenciales de la democracia representativa», «respecto a los derechos humanos», «elecciones periódicas, libres, justas y secretas» y un «sistema pluralista de partidos políticos».

Cuba ha firmado algunos pactos de derechos humanos de la ONU y celebra elecciones regularmente, pero los disidentes denuncian que se violan los primeros y que las segundas no son representativas. La diferencia de opiniones es clara. Sin embargo, de lo que no hay duda es de que el Partido Comunista es el único legal y no está previsto que el sistema se abra -por ahora- a la competencia.

De todas formas, Cuba se ha sentido reivindicada. El régimen calificó el hecho como acto de dignidad y justicia histórica que simboliza un triunfo de América Latina y el Caribe.