Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizJerez
CALLE PORVERA

¿Nadie habla de otra cosa?

SALVA GALVÁN sgalvan@lavozdigital.es
Actualizado:

Ya he comentado que el ascenso del Xerez Club Deportivo me está quitando la vida? Bueno, por si alguien no se enteró ayer, hoy lo vuelvo a repetir. Mi supervivencia pende de un fino hilo de vida que es la que me mantiene aporreando el teclado de un ordenador que no para de echar humo (humo azulino para ser exactos). Pero eso casi que no es lo peor, este histórico momento llegado para el disfrute del jerezano y el xerecista me está superando, me está bloqueando e incluso (siento reconocer esto) aburriendo. Sí. Me entenderán si lo explico: mis días son más que nunca en azulino, pues uno se levanta y acude a cubrir los entrenamientos del Xerez. Allí todo es xerecismo, pues los jugadores hablan del partido, los aficionados comentan las cuentas para ascender y los técnicos, la dificultad del rival. Horas después, llegas a la redacción del periódico (todavía en proceso de formación tras la mudanza) y te zambulles en las páginas del Xerez Deportivo. Es decir, estamos hablando de toda la tarde con el azulino sobre el teclado, levantado teléfono xerecista e investigando posibles incorporaciones del Deportivo. Cuando terminas las páginas del día, te colocan por delante todas aquellas que los periódicos estamos preparando para el suplemento especial del ascenso.

Y en el momento que uno pone rumbo a casa saliendo agotado de xerecista, azulino, Xerez Club Deportivo y Chapín, se topa, nada más salir a la calle, gente y más gente hablando de lo mismo. Nadie tiene otro tema de conversación que no sea el dichoso equipito.

Y ningún espabilao me podrá decir que no quiero que suba a Primera, pues estoy deseando. Es más, creo que me pasa como a los jugadores, la semana se me hace eterna esperando que llegue el partido. Por todo esto, creo que padezco una enfermedad, la xerecitis. La prueba es más que evidente: cuando puedo escribir sobre otros temas en este artículo de opinión, otra vez acabo con el azulino en el teclado.