Barroso, junto a Alcaraz, en su comparecencia de ayer. / LA VOZ
PUERTO REAL

Barroso anuncia que ratificará sus acusaciones contra la Corona ante el juez

El juicio por injurias al alcalde será el martes en la Audiencia Nacional

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Representantes de Izquierda Unida (IU) y del Partido Comunista de España (PCE) protagonizaron ayer en Madrid un acto de «apoyo y solidaridad» hacia el alcalde de Puerto Real y diputado provincial de Izquierda Unida, José Antonio Barroso, que el próximo martes se enfrentará en la Audiencia Nacional a un juicio en el que está acusado de un delito de injurias graves al Rey.

El coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas; el presidente ejecutivo y el ex secretario general del PCE, Felipe Alcaraz y Paco Frutos; y la secretaria de comunicación interna de la Comisión Ejecutiva Federal de IU, Amanda Meyer, mostraron su respaldo a Barroso, que confirmó que el próximo martes ratificará ante el juez los insultos que dirigió al actual Jefe del Estado.

El alcalde aseguró sentirse «legitimado», como hombre «libre» que es, para «desenmascarar» la «visión catódica y edulcorada» que existe del Rey. «No soy un lerdo ni un lacayo y tengo capacidad para discernir e interpretar lo que leo y eso concluye que este ciudadano, que tiene impunidad, se comporta de forma irregular», aseveró el alcalde para quien, si las lecturas sobre las que asienta su pensamiento sobre el rey son «irreales o inciertas», los tribunales también deberían de haber procedido contra quienes las escriben.

Barroso coincidió con sus compañeros en que la actuación de la Fiscalía al pedir la apertura de la causa oral pretende no sólo inhabilitarle a él, sino «inhabilitar a toda IU» como «única» fuerza capaz de promover un proceso que» acabe en un referéndum sobre la república».

Para Alcaraz, si las declaraciones de Barroso hubiesen tenido como objetivo a Rajoy o a Zapatero no habría pasado «nada» pero, al ser sobre el «funcionario político», el alcalde «no puede demostrar» que las injurias de las que se le acusa no sean ciertas. Estamos en una «democracia tutelada y vigilada, una democracia bonsái», argumentó Alcaraz para quien el Rey, pese a no contar con el prestigio que da a un político el respaldo de las urnas, está «superprotegido».

En la misma línea, el responsable de IU de Andalucía, Diego Valderas, mantuvo que la monarquía es una institución «limitadora de la democracia en una Europa ampliamente republicana» y defendió el derecho democrático de, como a su juicio hizo Barroso, criticar cualquiera de los aspectos que afectan a la democracia española.

El abogado defensor de Barroso, enrique Santiago, aseguró que el 80% de las pruebas presentadas por la defensa no han sido admitidas y lamentó que la actuación contra su defendido «limite la libertad de expresión de un cargo público».