Explosivos con matrícula
Un código de barras en cada producto detonante impedirá su llegada a manos de los terroristas
| COLPISA. MADRID Actualizado: GuardarLa Guardia Civil va a controlar en tiempo real los movimientos de cada cartucho, detonador o mecha que entre, circule o se fabrique en España. El propósito es evitar, como sucedió en los atentados del 11-M, que explosivos legales de uso civil terminen en manos de terroristas gracias a la falta de supervisión y de seguimiento hasta la 'muerte' de estas sustancias.
Los ministerios de Interior y de Industria, Turismo y Comercio han aprobado una actualización del reglamento de explosivos de 1998 que obliga a todas las «personas físicas o jurídicas» que se dediquen a la fabricación, almacenamiento, transferencia, importación o comercialización de este tipo de componentes a identificar cada uno de sus productos con un código de barras que hará único cada elemento, con el fin de que las Fuerzas de Seguridad puedan saber en cada momento dónde se encuentra.
El Gobierno ha dado en llamar este seguimiento «sistema armonizado para la identificación única para la trazabilidad de los explosivos con usos civiles». Según la orden presidencial 1263/2009, todos los profesionales que trabajen en el sector tendrán que actualizar sus métodos de identificación para «adaptarse a las condiciones establecidas» antes del 5 de abril de 2012.
Todo el sistema se basa, según los técnicos de Interior, en hacer de cada cartucho una «pieza única» gracias a ese sistema de códigos electrónicos que revelará de inmediato el historial del explosivo, desde su fabricación hasta su uso final. Esta nueva matrícula puede colocarse en cada pieza fijada, estampada o impresa, y deberá ser legible de inmediato. Sometida a un escáner, en unos segundos ese código de barras alfanumérico de 23 dígitos informará de todos los movimientos de ese material desde su nacimiento.
La orden establece que todos los elementos relacionados con las voladuras deberán someterse a ese sistema de «trazabilidad»: materias explosivas, detonadores, cebos, multiplicadores, cordones detonantes y mechas de seguridad.
La Intervención Central de Armas y Explosivos de la Guardia Civil llevará un control de todos los productos a través de una base de datos. Para que el sistema sea útil se requiere la colaboración de fabricantes y distribuidores, por lo que la nueva normativa les obligará a «poner en práctica un sistema de recogida de datos, que incluya la identificación única a lo largo de la toda la cadena de suministro y de su ciclo de vida, de tal manera que en todo momento pueda saberse su tenedor».