El Atlético logra la proeza con diez jugadores

Una proeza en la segunda parte, con un 0-2 en contra y diez jugadores, levantó al Atlético de Madrid en un momento crítico, cuando las opciones de Liga de Campeones amenazaban con escaparse definitivamente ante un Espanyol mejor en la primera mitad, pero asustado ante el empuje rojiblanco tras el descanso.

El gran protagonista del encuentro fue el uruguayo Diego Forlán, autor de dos goles (con el definitivo 3-2 en el tiempo de descuento). Los tantos aturdieron a un conjunto blanquiazul que dejó escapar una ocasión inmejorable para cerrar su permanencia en Primera División.

Los visitantes, con Iván de la Peña al mando en el centro del campo, manejaron el inicio del duelo con mucha movilidad, rapidez, convicción y valentía.

Al Atlético se le complicó el partido cuando el reloj superaba la media hora de juego. En apenas ocho minutos, el colombiano Luis Amaranto Perea vio la roja directa por un codazo y el equipo encajó dos goles.

El primero, en un penalti de Mariano Pernía sobre el uruguayo Iván Alonso, transformado por Nené en el minuto 35, y el segundo en un saque de falta rematado en el segundo palo por Jarque en posición dudosa, en el minuto 37. Duro castigo para el Atlético, obligado a remontar un 0-2 en la segunda parte con diez hombres.

Una hazaña improbable por el desarrollo del partido, pero aún posible, sobre todo con el 1-2 del uruguayo Diego Forlán, un cañonazo imparable desde lejos que dio ilusión al Atlético.

El 2-2 llegó de las botas del Kun Agüero, que transformó en gol un centro de Mariano Pernía en el minuto 60.

Lo intentó el conjunto madrileño hasta el final, con más de un susto en los contragolpes de su rival, y logró la proeza, un 3-2 impensable en el inicio de la segunda mitad con 0-2 en el marcador y un hombre menos. Lo firmó Forlán, a pase de Simao. Un gol que reforzó la vida del Atlético en la lucha por la Champions y que supuso el gol número 26 del delantero en la presente Liga.