Lorenzo toca el cielo en Japón
El español subió a lo más alto del podio, escoltado por Valentino Rossi y Dani Pedrosa El mallorquín y el italiano hicieron disfrutar con un maravilloso duelo que se decidió al final
| COLPISA. MOTEGIActualizado:Volvió a conquistar un territorio desconocido para él. Clavó su bandera, se puso de rodillas y apretó los puños. Había ganado. Jorge Lorenzo no deja de sorprender. Y que siga haciéndolo. El mallorquín se adjudicó la victoria en el Gran Premio de Japón a lo grande y se coloca como líder del Mundial. Impresionante. Rossi tuvo que conformarse con la segunda plaza, mientras que Pedrosa resurgió y subió al último escalón del podio en una carrera memorable.
Los pilotos llegaron a la prueba sin haber realizado a sus máquinas la puesta a punto que les gustaría porque la meteorología se volvió a poner caprichosa el sábado. La lluvia arruinó los entrenamientos cronometrados y se había rodado muy poco en seco. Por eso, entre otras cuestiones, ayer en la parrilla la mayoría optó por un neumático duro. No era cuestión de arriesgar.
Il dottore ya había mandado un recadito a Stoner el viernes. Aquí estoy, le vino a decir tras conseguir la pole. Y nada más apagarse el semáforo dejó claro que salía a resarcirse de lo ocurrido en Qatar. En esta ocasión el que no abrió gas a tiempo fue el australiano que, sin comerlo ni beberlo, se vio relegado a la séptima plaza tras la primera vuelta. Entre otras razones porque Pedrosa tiro de casta y se colocó tercero cuando partía desde el puesto once. A su rebufó estaba Lorenzo, que en el siguiente giro dio buena cuenta del catalán. Para entonces el italiano ya buscaba abrir hueco y marcharse en solitario. Pero en esta ocasión su táctica no funcionó. O mejor dicho, su compañero de equipo la echó por tierra. Porque el balear salió en su busca y, aunque le costó un poco coger su rebufo lo hizo poco más tarde. A falta de 16 giros para la conclusión.
Stoner, impreciso
Antes se vio a un Stoner nervioso, pasándose en las frenadas para tratar de remontar posiciones. Cuando quiso reaccionar fue demasiado tarde. Por delante el hueco abierto por las dos Yamahas y las dos Hondas era excesivo. Fue el único invitado que no se apuntó a la fiesta. Porque haberlo hubo. Más que fiesta, espectáculo del bueno. Lorenzo adelantó a Rossi, pero su primer intento tuvo respuesta del de Tavullia. En el segundo, sin embargo, el mallorquín le superó y logró contenerle. A partir de entonces comenzó una contrarreloj para abrir hueco.
Por detrás, Pedrosa quería más que la tercera plaza que ocupaba en ese instante. A falta de diez vueltas también cogió al italiano, y poco más tarde se enzarzaron en una serie de adelantamientos. Adrenalina en el asfalto. La montura del catalán corría en casa y no se podía permitir tener a dos de sus máximos rivales delante. Frenadas al límite, varios interiores... ¡Qué bonito!. Sin embargo, para el italiano era demasiado ceder dos puestos, y tras recuperar su segunda plaza, como por arte de magia, comenzó a meter metros de por medio con Pedrosa, que para estas alturas de carrera tampoco estaba para echar cohetes con su rodilla todavía algo maltrecha.
Es más, el de Tavullia salió tan reforzado del duelo que encontró el ritmo y trató de coger a Lorenzo. Le recortó algo la diferencia, pero el mallorquín estaba crecido y dispuesto a adjudicarse su segunda victoria en la categoría reina, en su segunda carrera con los Bridgestone. Y lo hizo. Elías terminó decimoquinto tras caerse y regresar a pista, y Sete Gibernau también se fue al suelo. Las espadas siguen en todo lo alto. Que se prepare Jerez.