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La entidad denunciará al Ayuntamiento por la compra del Sancho Dávila

F. PEREA
| PUERTO REALActualizado:

El Puerto Real ya no espera casi nada del Ayuntamiento de la localidad. Así lo han expresado los dirigentes de la entidad en mitad de esta complicada semana. No obstante, la desconfianza del presidente Antonio Bohórquez hacia los representantes municipales es máxima. Dicha situación ha propiciado que las relaciones del mandamás verdiblanco con el alcalde José Antonio Barroso, así como con Antonio Noria, teniente alcalde de Urbanismo, y José Olmo, gerente de la empresa pública municipal de suelo (Epsuvi), se hayan deteriorado ostensiblemente.

Sin ir más lejos, Bohórquez señaló: «Antes que hacer declaraciones contra la Casa Real, Barroso debería preocuparse más del equipo de su pueblo».

Esta situación ha dado lugar al encierro de la plantilla en los vestuarios del campo de deportes Sancho Dávila, dados los impagos generados en los últimos meses. Y es que, al fin y al cabo, la situación se torna cada vez más complicada porque no parece que exista otra alternativa al cumplimiento de las cláusulas de los convenios de venta y permuta del terreno de juego portorrealeño por el futuro nuevo estadio de la localidad, firmados por el club y la Epsuvi en dos convenios de fechas 29 de junio de 2006 y 27 de julio de 2007.

En la tarde del pasado martes, y minutos antes de que la plantilla del Puerto Real se encerrara de forma indefinida, el presidente del club, rodeado de sus directivos, realizó una rueda de prensa en la que comunicó que, a partir de este momento, pone en manos de su bufete de asesores legales los dos convenios firmados con la empresa pública de suelo de la localidad. No en vano, la entidad maneja denunciar ante la Justicia al Ayuntamiento y a Epsuvi por el importe total de los 14 millones de euros que supone el monto total de la operación, en la que vendía su estadio a cambio de la construcción y titularidad del nuevo estadio. Por todo ello, y a la espera de una mediación, las relaciones entre el club y el Consistorio están prácticamente rotas.