la estética de la población
Actualizado:Contamos con más medios que nuestros antecesores para estar mejor informados y cultivados pero la impresión que demos como sociedad es de ser más superficial que las generaciones anteriores. Lo digo por que me quedo impresionado cuando, en estos tiempos de crisis que corren, leo que hay gente capaz de pedir un préstamo para hacerse operaciones estéticas.
No es que me parezca mal que la gente se opere su cuerpo cuando y como quiera. Cada uno es libre de hacer lo que crea conveniente y también responsable, o al menos consciente, de los problemas que puede acarrearle en el futuro. En los últimos días saltó una nueva noticia sobre fraudes en este campo tan demandado últimamente por buena parte de la población para intentar ser más guapo o parecerse al menos al prototipo de persona que le gustaría ser. No es novedoso que varios clientes hayan demandado a un supuesto cirujano estético pero me sigue llamando la atención que antes de tomar una decisión tan importante como esa, la gente no se asesore bien de los efectos que puede acarrearle y sobre el historial del médico al que están cediendo su cuerpo.
Por increíble que parezca en ciertos sectores de la población sigue funcionando mejor el boca a boca en estos asuntos que los instrumentos más acordes con los tiempos que vivimos.
Seguramente habrá muchas personas que se sientan más seguras al contar con una nariz o una boca perfecta o por tener más pecho que antes, pero las rémoras de una intervención con negligencias puede tener consecuencias irrecuperables y dañinas para el resto de sus vidas.