La Encarnación estará de besamanos el domingo en la iglesia de San Miguel

La hermandad del Santo Crucifijo será la encargada de cerrar de manera oficial la Semana Santa jerezana gracias al besamanos que tendrá lugar el próximo domingo, 19 de abril, en la iglesia de San Miguel. Se da la circunstancia de que también es la que abre la Cuaresma, ya que el Santo Crucifijo está expuesto en besapies el Miércoles de Ceniza en el sagrario de la parroquia.

En la hermandad de la Madrugá existía la costumbre de celebrar una Eucaristía solemne a su imagen dolorosa el martes después de Semana Santa, para celebrar el día de la Encarnación, que suele caer en Cuaresma lo que impide la celebración del mismo. Ante el éxito del año pasado, cuando se pasó el besamanos de la Señora justo a ese día, la hermandad que preside Luis Cruz de Sola ha decidido repetir la experiencia, pero pasando el besamanos de manera fija al domingo siguiente al de Resurrección, celebrando función solemne a la dolorosa a las doce de la mañana quedando en besamanos, en el altar mayor de la iglesia, el resto de la jornada.

Asimismo, desde la hermandad se ha querido resaltar la actitud y colaboración de los operarios municipales ante las quejas por el alumbrado de San Miguel en la salida de la pasada Madrugá. La hermandad ha destacado que «es evidente que nadie puede tocar en las redes eléctricas salvo personal municipal debidamente acreditado. El retraso se debió a un problema técnico», y no a un olvido.