Ben Affleck afirma ser hoy mucho más maduro. /L. V.
BEN AFFLECK ACTOR Y DIRECTOR

«Mi vida es muy extraña, vivo bastante aturdido con mi realidad»

Estrena 'La sombra del poder', un drama político donde interpreta a un congresista con una doble vida y en el que comparte cartel con dos pesos pesados, Helen Mirren y Russell Crowe

| COLPISA. LOS ÁNGELES Actualizado: Guardar
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Ben Affleck demuestra al hablar su gran sentido del humor, su sinceridad, sus ganas de retomar su carrera de actor tras varios años apartado de la gran pantalla. El actor estrena hoy La sombra del poder, un drama político donde se mete en la piel de un congresista con una doble vida. Este congresista es el mejor amigo de un periodista de investigación interpretado por Russell Crowe. Casado con la actriz Jennifer Gardner y padre de dos niñas pequeñas, el actor, guionista y director norteamericano (ganó un Oscar como mejor guionista junto a su mejor amigo Matt Damon) sigue mostrando ese estilo ambiguo a medio camino entre el amigo de toda la vida y el seductor de horas tardías.

-Un político infiel. ¿Los políticos engañan por naturaleza?

-No lo creo. En esta película los personajes son muy atractivos, pero todos tienen su lado oscuro. Creo que es irrelevante para la vida de un político su situación doméstica. Un buen líder, lo único que tiene que hacer, es gobernar bien. Su vida sexual tiene que quedar al margen.

-Pero si mienten a la mujer también pueden mentir a los votantes. Es el elemento de la confianza el que pierden

-Supongo que sí, pero voy a ponerle un ejemplo. Imaginemos que hay dos cirujanos que pueden operar a su hija del corazón. ¿Cual prefiere: uno excelente que engaña a su mujer o uno mediocre que es fiel?

-No hay duda.

-Es que no puede haberla. Estamos viviendo en una sociedad obsesionada con la vida privada de los demás. Perdemos mucho tiempo concentrándonos en cosas que realmente no tienen importancia.

-De todas maneras no parece muy adecuada la comparación de médicos con políticos.

-No veo a los políticos como representación de nuestra humanidad, los veo como instrumentos de Gobierno. Gente que tiene que hacer un trabajo en nuestro nombre para crear leyes. En el caso de esta película, no creo que sea relevante si conducen un coche o una motocicleta o si cometes errores en su vida matrimonial.

-¿Se ha metido alguna vez en ese tipo de problemas?

-Si me ocurriera, probablemente no lo diría (risas)

-¿En qué momento le propusieron rodar esta película? ¿Tuvo tiempo para prepararse? Se lo pregunto porque en un principio Edward Norton iba a interpretar su papel y Brad Pitt el personaje de Russell Crowe.

-Sí; yo fui él último en ser contratado para este filme. Brad empezó a hacer la película, pero luego la dejó. Le sustituyó Russell. La película cambió el calendario de rodaje y Edward tenía otro compromiso. Russell y el director me llamaron para interpretar este personaje. La verdad es que no tuve mucho tiempo para prepararme. Russell fue muy generoso conmigo, al igual que Helen Mirren y Rachel McAdams.

-¿A qué político admira, tanto del pasado como del presente?

-Jefferson es alguien a quien admiro. No sé si Sócrates cuenta como político, pero fue un tipo impresionante. Admiro a Lincoln y, por supuesto, a Obama. También a hombres como Martin Luther King, que no fue político pero hizo mucho por la política y por cambiar el rumbo de este país.

-Su mejor amigo en el filme es un periodista, ¿Siente ahora más respeto por esa profesión?

-Yo no diría tanto, pero me he dado cuenta que hay mucha competición entre los periodistas y las instituciones. Y he aprendido que es fácil distorsionar la verdad

-¿Cuando empezó su carrera como actor soñó alguna vez en conseguir todo lo que ha conseguido?

-Mis sueños corrían en otra dirección, siempre he querido actuar, pero pensaba que era imposible mantenerse con esta profesión. Sólo el 5% de los actores tiene trabajo fijo. Yo siempre tenía gente que me decía: «Te vas a morir de hambre, nunca vas a trabajar, vives arruinado». Considero una victoria ser capaz de vivir como actor sin necesidad de un segundo trabajo. Pero ahora mi vida es muy extraña en muchos sentidos. No se parece a nada a lo que había soñado. En algunos aspectos es mejor, en otros bastante peor. Es algo que no esperaba. Vivo bastante aturdido con mi realidad.

-¿De qué se arrepiente?

-De muchas cosas. Hay críticas a mis películas que me gustaría borrar de mi mente. Desearía no haberlas leído jamás.

-Es padre de dos niñas y está casado con Jennifer Gardner. ¿Influye mucho su mujer en su vida?

-A ella le encantaría escuchar que sí, y es cierto. Con los años voy aprendiendo. Ahora me siento mucho más maduro que a mis treinta y por supuesto que a mis veinte. Estoy feliz disfrutando de mi vida de casado, me siento cómodo y me gusta ver en quien me he convertido.

-¿Ya no quiere ser el actor sexy? -Mi forma de enfrentarme a mi carrera ha cambiado. Ahora me siento mucho más conectado a mi trabajo desde un punto de vista creativo. Me gusta escribir, contar historias. Estoy menos interesado en la imagen física, en lo que sucede con la taquilla o en proyectos comerciales que me brinden una carrera muy larga.