El Gobierno ve «dentro de la normalidad» las discrepancias con el Banco de España

La polémica la desató el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, cuando propuso retrasar a los 67 años la jubilación como receta para evitar el déficit creciente en la Seguridad Social. El Gobierno y los sidicatos no han ahorrado críticas contra esta propuesta aunque, tras el Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, ha tratado de restar importancia a las direfencias con el responsable de la entidad emisora.

De la Vega ha señalado que las discrepancias entre el Gobierno y el Banco de España sobre el futuro del sistema de pensiones están dentro de la "absoluta normalidad". En la rueda de prensa posterior a la reunión, la número dos del Ejecutivo ha rebajado el tono de las críticas a Fernández Ordóñez por haber cuestionado el superávit de la Seguridad Social y el futuro del sistema de pensiones.

La vicepresidenta primera ha señalado que las opiniones que tiene el Banco de España son, en "la mayoría de las ocasiones", coincidentes con las del Gobierno, y en otras, "como ahora, no", pero ha insistido en que es un organismo autónomo que tiene entre sus funciones la de asesorar al Gobierno, lo que no significa que el Ejecutivo tenga que estar de acuerdo con sus conclusiones.

Habrá superávit en la Seguridad Social

María Teresa Fernández de la Vega ha subrayado que, como dijo ayer Corbacho, la Seguridad Social cerrará este año con superávit y el cobro de las pensiones está garantizado. También ha recordado que el Fondo de Reserva de la Seguridad Social, la conocida "hucha de las pensiones", ha pasado de tener 603 millones de euros en el año 2000 a contar con más de 57.000 millones al cierre del ejercicio pasado.

La vicepresidenta primera ha insistido en que el Gobierno "no va a dar ni un solo paso atrás en nuestro sistema de protección social", y ha destacado las subidas de pensiones mínimas y prestaciones, como el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), aprobadas en los últimos cinco años. "Todo lo demás", decía al aludir de nuevo a la polémica con Fernández Ordóñez, son "debates que se producen en el marco de una comisión", la de seguimiento del cumplimiento del Pacto de Toledo, "en la que se hacen reflexiones".

Ante la petición, por parte de los sindicatos, de reprobar a Fernández Ordóñez, e incluso de relevarle, De la Vega ha matizado que el Gobierno está "comodísimo" con el gobernador, que preside un organismo que tiene sus funciones y su carácter autónomo, y este debate forma parte del "funcionamiento normal de las instituciones".