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El club no tiene respiro ni en el campo ni fuera de él. /R. R.
portuense

Una denuncia del representante Pepe Amorós provoca otro embargo al club

El juez ha dictaminado que los rojiblancos deben pagar 2.000 euros por sus servicios en la contratación del delantero Raúl Molina el pasado año

MANOLO BORNE
| EL PUERTOActualizado:

El Racing Portuense volverá a recibir y padecer un embargo. En esta ocasión será el intermediario Pepe Amorós, quien se tenga que poner a la larga lista de personas que esperan desde hace tiempo que el club rojiblanco haga frente a las deudas contraídas con ellos. Hace cerca de un mes, el club recibió un escrito del Juzgado de los Social de El Puerto, en el que se solicitaba el pago a Pepe Amorós de los derechos de asesoramiento de la contratación del jugador Raúl Molina, que militó la pasada temporada en el Portuense.

Plano deportivo

Según ha podido este medio, el club no se presentó al acto de reconciliación, ni al posterior juicio, y el juez ha dictaminado el embargo por una cantidad que ronda los 2.000 euros.

En el plano deportivo, hoy se sabrá si el defensa Rubén Anuarbe, podrá viajar a Ceuta. El club ha enviado un escrito al Comité de Competición alegando que fue un defensa del Linares el que derribó al jugador portuense dentro del área, cuando éste tenía la posición ganada, y que el colegiado interpretó erróneamente como una simulación en la caída. El Portuense ha recibido la razón en todas las demandas de este tipo que ha realizado durante la presente temporada.