Mario Bermejo no firma el empate

Mario Bermejo tiene ganas de regresar a la competición oficial después de haber vivido desde su domicilio la victoria que sus compañeros lograron en la Nueva Condomina de Murcia. El delantero cántabro se perdió la última cita por sanción, pero se muestra ilusionado por volver a defender la camiseta azulina en un duelo que presenta todos los alicientes para ser el partido de la jornada.

En este sentido, el punta xerecista comentó que «las ganas son muy grandes después de este pequeño descanso pero estoy concienciado de que hay que trabajar para ganar la confianza del míster pues se trata de un partido idóneo para regresar». No en vano, la importancia del choque es tremenda, tal y como asegura Bermejo, pues «desde hace unos cuantos partidos ya venimos jugando finales. En esta ocasión, de cara al espectador es muy atractivo al enfrentarse primero contra segundo, pero pienso que va a ser intenso y emocionante porque somos dos buenos equipos, algo que hemos demostrado a lo largo de la temporada, y sólo espero que esta vez seamos capaces de romper la mala racha que acumulamos contra los equipos de arriba».

La última victoria a domicilio contra los pimentoneros ha supuesto un golpe de autoridad de los azulinos ante sus rivales y por ello Mario Bermejo confirmó que «al equipo lo ví muy bien ante el Murcia. Rindió a un buen nivel y ganamos un partido muy complicado. Estamos convencidos de poder rubricarlo en este próximo encuentro ante el Hércules». Los números cosechados por los alicantinos en los últimos siete partidos le avalan para ser considerado por algunos como el equipo más enforma de la categoría, aunque el punta azulino piensa que «tanto Zaragoza, Hércules y Tenerife están al alza. Tienen grandes plantillas y sus presupuestos nos superan bastante, pero no en ilusión, ya que ahora mismo la que tiene el Xerez es superior a la de todos los demás porque nunca hemos disfrutado de la Primera División y eso tiene que anteponerse y darnos puntos a favor. Además, jugamos en Chapín y esperamos que el estadio se llene aún más si cabe. Por todo ello, estoy totalmente convencido de que este partido lo vamos a ganar».

De todas formas, Bermejo piensa que nada va a quedar decidido tras el siguiente encuentro, «pues la igualdad de puntos y la variedad en los resultados de todas las jornadas hace que aunque perdamos un partido no nos descolgaríamos, pero no pensamos en la derrota, pensamos en ganar haciendo un partido muy serio, mejorando esos pequeños aspectos que no nos han permitido sumar en casa en los últimos partidos y ver al equipo que estábamos acostumbrados. Tenemos que estar fuertes en defensa porque sabemos que en ataque siempre solemos crear oportunidades y hacemos goles, por lo que pienso que si somos capaces de presionar bien a su línea defensiva y estamos juntitos, creo que tendremos mucho ganado». Pese a todo, el delantero cántabro no es partidario de cambiar la filosofía de juego del equipo para este duelo en la cumbre, en busca de un estilo más pragmático. «Creo que debemos intentar hacer el fútbol de siempre, lo que ocurre es que los rivales nos conocen mejor y los resultados quizás son más importantes ahora. Por eso se toman los partidos con más tranquilidad, intentando asegurar los empates fuera de casa para hacercarse a sus objetivos, pero creo que este partido es distinto porque el Hércules viene con mucha moral y confianza, tras los últimos resultados, y espero que no venga a encerrarse atrás, viendo además los jugadores que tienen en todas las lineas», explicó.

Más igualdad por arriba

A priori, Bermejo se muestra ambicioso y antes de comenzar cualquier encuentro «no firmaría el empate nunca, salvo que el ascenso dependiera de un punto. Además, creo que muchas veces si sales a empatar acabas perdiendo. Una vez que veamos cómo se desarrolla el partido, sabremos si el punto es bueno o no. Jugando en casa y dado lo que está en juego, vamos a ir a por los tres puntos y no podemos especular con el resultado».

En las últimas jornadas la zona alta se ha comprimido mucho más y las diferencias entre los primeros clasificados es más escasa. Por eso, el delantero xerecista es consciente de que «esta circunstancia va a dar un poco más de emoción y un puntito de motivación para que nadie se pueda relajar, y creo que en cierto modo tampoco es malo. Antes había seis puntos entre el primero y el cuarto y ahora sólo hay tres. Nadie se puede confiar por tanto».

En todo caso, Bermejo está convencido de que el Xerez tiene la obligación moral de luchar por el ascenso, mientras que la mayoría de los rivales directos, como pueden ser Zaragoza, Hércules, Tenerife o Real Sociedad, están obligados a subir a Primera. «No es una oblicación como objetivo, aunque nosotros nos la imponemos. Ellos en cambio han apostado por el ascenso abiertamente desde que comenzó la Liga. Nosotros lo vemos como un premio que nos ha dado el buen trabajo y la excelente sintonía que hemos tenido, y por eso debe ser una presión positiva».

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